Segundo Mes: La educación de Saulo

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Segundo Mes

La educación de Saulo

Gamaliel fue presidente del Sanedrín (del griego Sinedrion o "Senado", es decir, un "cuerpo de ancianos de los judíos". Se sabe que por su aplomo y sabiduría era escuchado con reverencia y respeto en el concilio. Gamaliel era también el principal líder de la escuela que llevaba su nombre, la cual se distinguía por ser muy humanitaria y benigna en la interpretación y aplicación de la ley judía. Este centro de estudios era conocido como de tendencia más liberal y popular que la escuela de Shammai, su contemporáneo.

Frente al noble Gamaliel se destacaba la recia e irascible personalidad de su colega Shammai, otro importante miembro del Sanedrín y director de la escuela que fundó en Jamnia. Shammai era muy conservador en la interpretación de la ley, y mucho más exigente que Gamaliel en la aplicación de la misma. Por ejemplo, Gamaliel permitía que una pareja se divorciara por una diversidad de razones que pudieran considerarse justas. En cambio, Shammai enseñaba que la única razón aceptable para el divorcio era el adulterio.

La aversión que movía a Saulo de Tarso contra la joven y primera era de la “iglesia de Éfeso”, no se puede atribuir únicamente a su formación como fariseo, porque algunos de ellos creyeron en Jesús o bien condescendieron con la fe. Por ejemplo, muy temprano en el ministerio de Jesús, un fariseo que se llamaba Nicodemo, un principal entre los judíos (Juan 3:1), vino de noche a Jesús y se convirtió en un discípulo secreto del Señor. Más tarde, cuando algunos de los alguaciles manifestaban admiración por Jesús, los demás fariseos se expresaron negativamente, pero Nicodemo se levantó para hablar a favor del Maestro, a pesar de la oposición de ellos (Juan 7:50-52). La tercera vez que Nicodemo aparece en el escenario del Nuevo Testamento fue para la muerte y sepultura de Jesús: "También Nicodemo, el que antes había visitado a Jesús de noche, vino trayendo un compuesto de mirra y de aloes, como cien libras" (Juan 19:39). Que este respetable fariseo se mantuviera fiel a Jesús significa que el fariseísmo no siempre asumía una posición beligerante contra el evangelio.

También durante el ministerio de Jesús hubo algunos fariseos que mostraron ciertos gestos amables hacia Jesús. Lucas 7:36 afirma que "uno de los fariseos rogó a Jesús que comiese con él. Y habiendo entrado en casa del fariseo, se sentó a la mesa". Otro fariseo tolerante y favorecedor del evangelio fue Gamaliel, el líder del concilio que defendió a los apóstoles cuando los judíos intentaban matarlos. Las declaraciones de este noble representante de la ley y las tradiciones judaicas no sólo demostraban sabiduría humana sino también temor de Dios. Además, bajo cierto grado de iluminación del Espíritu Santo fue capaz de predecir el triunfo de la iglesia, la cual él concibió como una obra de Dios" (Hechos 5:34-40).

Esto nos indica que ser un fariseo no necesariamente significaba que se tuviera que ser enemigo del Salvador. Mientras que las razones de Saulo de Tarso para ser un enemigo de la fe cristiana son varias:

1. Por ignorancia e incredulidad.

Pablo mismo atribuía su actitud a su crasa ignorancia de la verdadera voluntad de Dios para su vida. En una de sus cartas pastorales escribió “habiendo yo sido antes blasfemo, perseguidor e injuriador; mas fui recibido a misericordia porque lo hice por ignorancia en incredulidad" (1 Timoteo 1:13).

2. Debido a su equivocado celo religioso.

 Pablo confesó que fue un empedernido perseguidor de los cristianos debido a que lo embargaba un celo enfermizo que había aprendido a lo largo de su vida acerca de la ley de Moisés y las tradiciones de sus antepasados. Contrario al criterio de otros fariseos, Pablo, era de la cerrada y egoísta posición de que nadie podía creer nada que no fuera lo que él pensaba. Posiblemente en su engreído corazón existiera la equivocada idea de ser un campeón defensor de la religión de sus padres como lo fue el profeta Elías, quien dio muerte a 450 profetas de Baal y 450 de Asera (1 Reyes 18:1-40).

3. Por ser temperamental.

 Por la manera en que Pablo reaccionaba a los incidentes desagradables que surgían a su paso, podemos asegurar que él era temperamental. Tal vez por eso estuvo de acuerdo con el cruento asesinato del primer mártir del cristianismo, Esteban (Hechos 7:58; Hechos 8:1; Hechos 22:20). Cuando el mago y falso profeta, el judío Barjesús, estorbaba la evangelización del procónsul Sergio Paulo, Pablo lleno del Espíritu Santo reprendió al farsante hiriéndolo con ceguera bajo el poder de Jesús (Hechos 13:6-11). Otro caso de severidad fue la forma en que Pablo reprendió a Pedro por su actitud legalista con los hermanos de Antioquía (Gálatas 2:11). Esto nos explica su furia en el tiempo de su cruel persecución contra los cristianos.

 

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