Quinto mes: Parábolas de tesoros y odres nuevos y viejos

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Quinto mes

Parábolas de tesoros y odres nuevos y viejos

“Nadie pone remiendo de paño nuevo en vestido viejo; porque tal remiendo tira del vestido, y se hace peor la rotura. Ni echan vino nuevo en odres viejos; de otra manera los odres se rompen, y el vino se derrama, y los odres se pierden; pero echan el vino nuevo en odres nuevos, y lo uno y lo otro se conservan juntamente” (Mateo 9:16-17).

Jesús quería que sus discípulos entiendan estas verdades, porque más tarde ellos mismos tendrían que enseñarlas. Jesucristo los estaba preparando desde un principio porque él quería que ellos fueran eruditos, sabios y expertos en la Palabra de Dios para de esa manera, transmitir fielmente los nuevos conceptos que Jesucristo establecía y aclaraba en las Escrituras. Por entonces predicaban “cosas viejas” es decir, provenientes del Antiguo Testamento. En cambio el maestro de Galilea les enseñaba que prediquen “cosas nuevas” y las que él les enseñaba en sentido de magnificar y exaltar la Ley de Dios, en el Nuevo Testamento, tal como el profeta Isaías lo dejó escrito: “El Eterno se complació por amor de su justicia en magnificar la ley y engrandecerla” (Isaías 42:21).

Dios quiere que cada miembro de la Iglesia de Dios también sea sabio y entendido en discernir su Palabra, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, dando más valor a los nuevos conceptos que nos enseñó nuestro redentor, sin apagar la luz del Antiguo, que es base para entender los nuevos conceptos espirituales.

En la parábola de los odres nuevos y viejos, Jesucristo expone la insensatez de los escribanos y fariseos, en su celoso apego hacia las viejas tradiciones de los ancianos; él da una razón por la que tales personas no fueron llamadas a participar del evangelio del Reino, pues aquellos se encontraban bajo viejos principios de autojusticia, ya que solamente los pecadores arrepentidos que fueron llamados por el Padre, habían sido renovados por Su Santo Espíritu y gracia derramada, mientras que los "odres viejos" apuntaban hacia los escribas y fariseos, porque ellos criticaban continuamente a Jesucristo, quién según ellos, estaba quebrantando la vieja tradición de los ancianos, la cual era la ley oral, transmitida por los rabinos en el pasado y codificada en la Mishna (parte del Talmud), la cual ellos consideraban superior a las mismas escrituras. Jesucristo desechó, de antemano, sus leyes rabínicas.

La institución de Jesús, por un lado, y la de los Fariseos por otra, nunca podrían estar de acuerdo y una tentativa de combinar los dos sistemas sería tan absurda como destructiva. Ciertamente, el viejo pacto hizo posible al nuevo, y lo declaró por concluido y terminado, porque si aquel primero hubiera sido sin defecto, ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo (Hebreos 8:7). Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual solamente por Cristo es quitado (2 Corintios 3:14). El nuevo pacto de odres nuevos, está lleno de mejores promesas, pues son básicamente espirituales y apuntan de lleno, hacia el Reino venidero de nuestro Padre, el cual magnifica en mucho, la ley del amor de Dios.

Ciclo hidrológico: El calor llega al máximo. Continua la temporada seca.

Cosecha de la temporada: Cosecha del Olivo y aceitunas en el llano.

Nombre del mes:Ab (Carece de identificación propia).

Quinto mes, 2012 IDUAI
Quinto mes, 2012

1) Conmemora la muerte de Aarón en el año 1404 AC, en el monte Hor. Números 20:22-29; y 33:58.

10) Ayuno del quinto mes Zac. 8:19,conmemora la destrucción de las murallas de Jerusalén por le ejercito de Babilonia II Reyes 25:8-9; y Jer.. 52:12 y la destrucción del segundo templo por Tito. Se trata del segundo ayuno nombrado por Zacarías 8:19 (10 de Ab de 586 AC).

15) Conmemora la reconciliación entre la tribu de Benjamín y las otras tribus Jueces 21.