#175 - Isaías 25-28
"Descripción del Milenio"
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#175 - Isaías 25-28: "Descripción del Milenio"
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El Comentario Bíblico de Unger explica muy bien este capítulo 24 como la antesala del Milenio. Hombres eruditos como Merril Unger entienden que estas profecías tienen que ver con los tiempos del Fin. Son sólo los teólogos liberales los que niegan esto. Dice Unger:
“Isaías 24:1-13 – Los Juicios en el día del Señor: Dios juzgará a la tierra y a sus habitantes; todas las clases sociales en los tiempos del Fin que rechazan a Cristo serán afectados. Descripción de las desolaciones apocalípticas [a escala mundial] y las razones dadas por su cumplimiento; este período está descrito en Isaías 2:6-22; Sofonías 1:1-18; Zacarías 12-14; Mateo 24-25; 2 Tesalonicenses 1:7-10; Apocalipsis 4:1 - Apocalipsis 19:16.
Isaías 24:14-16 - La Protección y el Himno de Gracia del Remanente: El himno comienza con “en ese día” y lo cantan el remanente fiel que es protegido por Dios de la Gran Tribulación (vea Apocalipsis 7:1-8; Apocalipsis 14:1-5).
Isaías 24:17-22 - Continuación del Día del Señor: Estará enfocado sobre los impíos en la tierra y sobre Satanás y sus demonios: ‘el ejército de los cielos en lo alto’... Satanás y sus ángeles son lanzados al abismo (vs. 22, y vea Apocalipsis 20:1-3), y la Bestia y el Falso Profeta al lago de fuego (Apocalipsis 19:20; Apocalipsis 20:10). Los malos serán barridos por los juicios de los sellos, de las trompetas y de las copas o destruidos en la Venida del Mesías” (Apocalipsis 19:11-19).
Isaías 24:23 - El Reino Milenial de Cristo: Será tan glorioso, que el resplandor del Sol y de la Luna “se avergonzarán” ante ese esplendor, es decir, quedarán opacadas en comparación. El Mesías reinará “en el monte de Sión y en Jerusalén, y delante de sus ancianos [los santos resucitados] será glorioso” (p. 322).
Sigue la descripción en el capítulo 25 de lo que ocurrirá una vez que venga Cristo a la tierra y concuerda con Apocalipsis 18-20. Al ver los santos que la moderna Babilonia, el sistema de la Bestia y el Falso Profeta, es destruida y que ellos fueron protegidos, entonan un himno de alabanza a Dios y Cristo. Dicen: “Eterno, tú eres mi Dios; te exaltaré, y alabaré tu nombre, porque has hecho maravillas; tus consejos antiguos son verdad y firmeza. Porque convertiste la ciudad en montón, [“se refiere a Babilonia, tipo de asiento del Anticristo, que será destruida en los últimos días vea Apocalipsis 18” El Comentario Exegético, p. 590]... Por esto te dará gloria el pueblo fuerte, te temerá la ciudad de gentes robustas. Porque fuiste fortaleza al pobre… Como el calor en lugar seco, así humillarás el orgullo de los extraños...” (Isaías 25:1-5).
¿Qué hará entonces Cristo? ¿Tendrá ira o rencor con las naciones? No, él no es un Dios vengativo, sólo aplicó la disciplina necesaria y ni un ápice más. Ahora viene el tiempo de bendiciones; de sanar, de amar y de instruir. Es la inauguración del Milenio, y comienza con una invitación a las naciones a asistir a un gran banquete junto con sus santos. Dice: “Y el Eterno de los ejércitos hará en este monte a todos los pueblos banquete de manjares suculentos, banquete de vinos refinados, de gruesos tuétanos y de vinos purificados” (Isaías 25:6). El Comentario Exegético explica: “gruesos tuétanos”, son los más selectos manjares [carnes suculentas de animales bien alimentados]; “vinos purificados”, vinos generosos y muy añejos, purificados de todo sedimento” (p. 591).
¿Qué hará Cristo en este banquete? Aquí comenzará la reeducación del mundo. “Y destruirá en este monte la cubierta con que están cubiertos todos los pueblos, y el velo que envuelve a todas las naciones” (Isaías 25:7). Al atar a Satanás “para que no engañase más a las naciones” (Apocalipsis 20:3), Cristo quitará el manto del engaño religioso que envuelve al mundo. Por su ignorancia de las Escrituras, el mundo ha permitido que se le ponga el velo de las falsas doctrinas con una educación mundana y religiones engañosas. Dios revela reiteradamente esta verdad y cómo se le quitará ese velo a las personas:
LA JEFATURA DE CRISTO SERA EN JERUSALEN
Isaías 2:2-3 - “Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa del Eterno como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones. Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte del Eterno, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos en sus sendas. Porque de Sión saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra del Eterno”. Aprenderán lo que es realmente guardar la ley de Dios.
LA REEDUCACIÓN POR CRISTO Y LOS SANTOS - REMOVERÁN EL VELO DE LA MENTIRA
Isaías 30:21 - “Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda. Entonces profanarás la cubierta de tus esculturas… las apartarás como trapo asqueroso; ¡Salmos fuera! les dirás”. Aplicarán el Segundo Mandamiento y repudiarán todas las imágenes religiosas del “cristianismo” o de otras religiones.
Jeremías 16:19 - “Oh Eterno, fortaleza mía y fuerza mía, y refugio mío en el tiempo de la aflicción, a ti vendrán naciones desde los extremos de la tierra, y dirán: Ciertamente mentira poseyeron nuestros padres, vanidad, y no hay en ellos provecho”. Este el primer paso en el proceso del verdadero arrepentimiento, admitir que las antiguas creencias eran falsas y dejarlas de lado.
Hechos 26:16 - “...porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro… para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios”. En el Milenio los santos harán todo esto.
2 Corintios 4:3-4 - “Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto; en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento [les puso el velo del engaño] de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo”. Satanás es el autor de ese velo del engaño.
2 Corintios 11:14-15 - “Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia cuyo fin será conforme a sus obras”. El velo de engaño les hace parecer a las naciones como si sus doctrinas contra las leyes de Dios fueran verdaderas. Les ponen el velo de la “falsa justicia” – una que no necesita obedecer los mandamientos de Dios.
1 Juan 5:19 - “Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno”.
Apocalipsis 12:9 - “Y fue lanzado fuera el gran dragón… Satanás, el cual engaña al mundo entero”
Además, este “velo o cubierta” que envuelve al mundo actual al permitir que dejen los mandamientos de lado produce todo el sufrimiento y muertes trágicas en el mundo. Por eso, también es un velo de luto. Cristo ahora saca esa maldición de en medio, y le ofrece a las naciones la oportunidad a la vida eterna. “Destruirá a la muerte para siempre; y enjugará el Eterno el Señor toda lágrima de todos los rostros; y quitará la afrenta de su pueblo de toda la tierra, porque el Eterno lo ha dicho” (Isaías 25:8). Cristo comenzará este proceso en el Milenio, y Dios el Padre lo terminará cuando descienda del cielo con la Nueva Jerusalén (Apocalipsis 21:1-4).
Este banquete a las naciones se menciona en varias partes de las Escrituras y es importante entenderlo:
Isaías 56:5-7 - “Y a los extranjeros que se unan al Eterno para servirle… a todos los que guarden el sábado sin profanarlo, y se mantengan firmes en mi pacto, yo los llevaré a mi santo monte, [cuando se lleve a cabo ese banquete] y los alegraré en mi casa de oración” (Versión NRV). Vemos que Dios aquí toma en cuenta el sábado durante el Milenio.
Zacarías 14:16,21 - “Y todos los que sobrevivieren de las naciones que vinieron contra Jerusalén, subirán de año en año para adorar al Rey… y a celebrar la fiesta de los tabernáculos...Y toda olla en Jerusalén y Judá será consagrada al Eterno de los ejércitos” [En el Milenio, habrá un banquete anual durante la Fiesta].
Lucas 12:36-37 “Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor, cuando venga, halle velando...s e ceñirá, y hará que se sienten a la mesa, y vendrá a servirles”. Cristo será el anfitrión y el servidor principal.
Lucas 13:28-29 “Allí será el llanto y el crujir de dientes, cuando veáis a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, y vosotros estéis excluidos. Porque vendrán del oriente y del occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios”.
Apocalipsis 19:7-9 “Gocémonos… porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado. Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino… porque el lino fino es las acciones justas de los santos… Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero”.
El resultado de asistir a este banquete será aceptar a Dios como Salvador e Instructor de su santo camino y ley. “Y se dirá en aquel día: He aquí, éste es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvará; éste es el Eterno a quien hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación” (Isaías 25:9-10).
El capítulo 26 continúa con la descripción del Milenio y menciona a la Primera Resurrección: “En aquel día cantarán este cántico en tierra de Judá: Fuerte ciudad tenemos; salvación puso Dios por muros y antemuro. Abrid las puertas, y entrará la gente justa, guardadora de verdades [una buena descripción de lo que es ser gente justa]. Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Confiad en el Eterno perpetuamente, porque en el Eterno el Señor está la fortaleza de los siglos. Porque derribó a los que moraban en lugar sublime; humilló a la ciudad exaltada” [Es Babilonia, representante de la fuerza de los enemigos del pueblo de Dios en todas las épocas; Isaías 25:2-12” El Comentario Exegético, p. 591]. “Los moradores de la tierra aprenden justicia (una de las tareas que haremos en el Milenio, Daniel 12:3). “Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán, ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos” (Isaías 26:1-19).
Aquí se menciona la Primera Resurrección en el Antiguo Testamento. Dice El Nuevo Comentario Bíblico: “Se menciona claramente aquí la promesa de una resurrección corporal… Se debe leer ‘mis muertos’ según el hebreo, en vez de ‘tus muertos’, pues se refiere a los siervos de Dios, que han ‘muerto en el Señor’” (p. 605). Unger añade: “Al igual que en Daniel 12:1-2, es evidente que este pasaje tiene puesta su mira en la resurrección física, desde que la primera resurrección abarca la participación en el reino. Apocalipsis 20:4-6)” (p. 330). Hay muchas verdades que estos autores conocen pero que no enseñan en sus iglesias por temor a ser removidos, por eso aceptan las doctrinas tradicionales, aunque sean falsas.
Antes de terminar, como ya Dios habló de “sus muertos”, ahora se dirige a los que estarán vivos cuando Cristo vuelva. Dice que los protegerá y que estarán escondidos cuando ocurra esta Gran Tribulación. Les dice: “Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación. Porque he aquí que el Eterno sale de su lugar para castigar al morador de la tierra por su maldad contra él, y la tierra descubrirá la sangre derramada sobre ella, y no encubrirá ya más a sus muertos [castigará al mundo por la creciente violencia y los asesinatos como en los días de Noé y por las muertes de sus santos que son parte de esa Primera Resurrección]” (Isaías 26:20-21). Noten que esto no se refiere a un castigo sólo de Israel, sino de todo el mundo, y en el contexto es el castigo de Dios. Esto encaja perfectamente con Apocalipsis 3:10 donde le dice a los fieles de su iglesia: “Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra”. Noten lo que dice El Comentario Exegético al respecto: “Cuando Dios esté por tomar venganza de los impíos, los santos serán encerrados por él en lugar seguro, como lo fueron Noé y su familia en los días del diluvio (Génesis 7:6) y como a los israelitas les fue recomendado que no saliesen fuera de la puerta de sus casas, la noche de la matanza de los primogénitos egipcios (Éxodo 12:22). Los santos tranquila y confiadamente han de aguardar el resultado final (Éxodo 14:13-14)” (p. 592).
Sigue el relato en el capítulo 27 con aún más detalles sobre los sucesos en la Venida de Cristo: “En aquel día el Eterno castigará con su espada dura, grande y fuerte al leviatán serpiente veloz, y al leviatán serpiente tortuosa; y matará al dragón que está en el mar”. Explica El Nuevo Comentario de la Biblia: “El juicio es total y el Leviatán corresponde al ‘ejército del cielo’, que son Satanás y sus ángeles” (p. 605). El dragón que matará en el mar se refiere a una criatura física que se parece a Satanás, el gran dragón rojo (Apocalipsis 12:3).
Ahora Dios habla del arrepentimiento de los descendientes de Jacob que ocurrirá en el Milenio. “Días vendrán cuando Jacob echará raíces… y la faz del mundo llenará de fruto… en aquel día… se tocará con gran trompeta, y vendrán los que habían sido esparcidos en la tierra de Asiria y… Egipto, y adorarán al Eterno… en Jerusalén” (Isaías 27:6,13). Dice El Comentario Exegético: “gran trompeta”, figura tomada de las trompetas tocadas el primer día del séptimo mes, para convocar al pueblo a la santa asamblea (Levítico 23:24). Simbólicamente, es la trompeta del evangelio (Apocalipsis 11:15; Apocalipsis 14:6) que… escucharán en los postreros días (Zacarías 12:10; Zacarías 13:1)” (p. 593).
Esto concuerda con lo que sabemos de la Venida de Cristo, cuando se tocará la trompeta y resucitarán los justos en la Primera Resurrección. También servirá para juntar al pueblo de Israel de entre todas las naciones para que se conviertan al Señor. Dice Zacarías 12:9-10 y Zacarías 13:1: “Y derramaré sobre la casa de David... espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron [se refiere a la crucifixión de Cristo], y llorarán como se llora por hijo unigénito… En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David… para la purificación de sus inmundicias”. Se trata del proceso de arrepentimiento y bautismo que la mayoría de nosotros ya hemos pasado.
En el capítulo 28, Dios dirige su mirada hacia las 10 tribus norteñas de Israel. Sabe que lo rechazarán en su mayoría, no sólo en ese entonces, sino en los tiempos del Fin. Le dice a Efraín, la nación jefe de estas tribus: “¡Ay de la corona de soberbia de los ebrios de Efraín… con los pies será pisoteada la corona de soberbia de los ebrios de Efraín” (Isaías 28:1-3). Noten que tiene que ver también con los últimos días: “En aquel día el Eterno de los ejércitos será por corona de gloria y diadema de hermosura al remanente de su pueblo” (Isaías 28:5-6). Habrá un remanente fiel de Efraín en su iglesia cuando vuelva Cristo.
Dios ahora reprende a estos sacerdotes y profetas ebrios que rechazan lo que les está diciendo Isaías: “...se entontecieron el sacerdote y el profeta erraron con sidra… erraron en la visión, tropezaron el juicio” (Isaías 28:7). Ellos se quejan de que Isaías siempre insiste en que guarden las leyes de Dios, y sienten que están por encima de estas simples enseñanzas. Dios les dice que con esa actitud jamás entenderán la Biblia y les será por tropiezo: “...él [Isaías] dijo: “Este es el reposo; dad reposo al cansado… mas no quisieron oír. La palabra, pues, del Eterno les será mandamiento tras mandamiento… línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; hasta que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, enlazados y presos” (Isaías 28:12-13).
Dice Unger: “Son orgullosos y borrachos. Por adelantado se hace referencia al castigo que vendrá por medio de la invasión asiria. El testimonio de la Palabra de Dios se les adelanta a estos pecadores, pero ellos rechazan la advertencia...” (p. 331). Las verdades importantes en la Biblia se encuentran una parte aquí, otra parte allá. Por eso, Dios les dijo a estos sacerdotes y profetas falsos que no podrán entenderla. Aclara el Comentario Exegético: “La forma en que Dios enseña, ofende por su simplicidad el orgullo de los pecadores (2 Reyes 5:11-12; 1 Corintios 1:23)... el reposo aludido es… la obediencia de aquellos mismos mandamientos de Dios de que ellos se mofaban [como del sábado]... lejos de aprovecharse del método de Dios para instruir: “precepto sobre precepto”, etc. lo han convertido en un tropiezo y caen, una descripción apropiada de los “ebrios” que al tratar de ir hacia adelante, caen hacia atrás” (p. 594).
Cristo dijo lo mismo en Mateo 13:13-17, y que la Biblia no sería entendible a los hombres inconversos. De modo que esta cita sobre “el mandamiento tras mandamiento… un poquito aquí y un poquito allá” sí tiene que ver con la interpretación de las Escrituras como la de un gran rompecabezas que los entendidos podrían armar. Algunos se han mofado de este uso que le dio el Sr. Armstrong. Pero Pablo explicó el mismo principio: “...hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando los espiritual a lo espiritual [como si fuera un gran rompecabezas]. Pero el hombre natural [inconverso] no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender [no puede acomodar las Escrituras en su lugar para llegar a las verdades], porque se han de discernir espiritualmente” (1 Corintios 2:12-14).
Al final del capítulo 28, Dios vuelve a advertirle a los líderes de Jerusalén que escuchen las palabras de Isaías o sufrirán las consecuencias. Estos gobernantes les contestan: “...hemos puesto nuestro refugio en la mentira, y en la falsedad nos esconderemos” (Isaías 28:14-15). No quieren confiar en Dios y han hecho pactos con juramento a la muerte con los egipcios para que los salven de los asirios. Dios contesta: “Y será anulado vuestro pacto con la muerte… cuando pase el turbión del azote (Asiria) seréis pisoteados”. También les entrega una profecía de confiar en Dios en los tiempos del Fin: “He aquí que yo he puesto en Sión por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure”. Unger explica: “La referencia mesiánica de la piedra probada (Daniel 2:34; 1 Pedro 2:8) proyecta la profecía a los tiempos del Fin y el pacto delinea el tiempo cuando la nación apóstata entra en tratos con el Anticristo (Daniel 9:27)... serán barridos todos en su venida” (p. 324).
Dios finaliza con un hermoso ejemplo de cómo aplica sus juicios. Usa la analogía del agricultor, que tiene que saber cuándo sembrar, cuándo regar, y cuándo cosechar. El Comentario Exegético explica: “Así como el labrador realiza diferentes géneros de trabajo y cada uno en su debido tiempo, y dentro de la debida proporción, así Dios adapta sus medidas a las variadas exigencias de los diversos casos: ahora misericordia, ahora juicio; ya castigando más temprano, ya más tarde [esta es la respuesta a los que se burlaban de sus juicios, al ser diferidos para tan lejanos tiempos, diciendo que en realidad nunca se cumplirán, ver Isaías 5:19]; el objeto de los mismos no era destruir al pueblo, como no es el propósito del agricultor, al trillar el trigo, el destruir la cosecha. Con esto se vindica la “extraña obra de Dios” (v. 21), de castigar a su pueblo” (p. 595). Este es un principio que debemos siempre tomar en cuenta, pues habrá burladores que acusarán a Dios de no cumplir con su Palabra. Pedro nos dice: “...en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias, y diciendo. ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación” (2 Pedro 3:3-4).
Es una buena advertencia para que nunca nos burlemos de las profecías de Dios, como muchos lo han hecho, para su propia vergüenza y futura destrucción.