Trágico error del rey Uzías

Todos necesitamos recordar con frecuencia las lecciones espirituales que Dios nos ha entregado. Y la historia del rey Uzías alberga muchas enseñanzas útiles para nuestros tiempos. Mensaje entregado el 7 de mayo de 2022.

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Ahora quiero ir al sermón de esta mañana, porque hace un tiempo atrás estaba leyendo un relato de uno de los reyes de Judá, que me llamó mucho la atención, porque deja muchas lecciones espirituales que todos necesitamos recordar y aplicar en nuestras propias vidas. Como nos dice en Romanos capítulo 15, versículo 4, pasemos a Romanos capítulo 15, versículo 4, nos dice, porque las cosas que se escribieron antes, esto es decir, en el Antiguo Testamento, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las escrituras tengamos esperanza. Entonces, estos relatos en el Antiguo Testamento, Dios los puso ahí para darnos aliento. Son lecciones para todos, para consolarnos y para darnos paciencia, que aquí la palabra significa perseverancia, tal como se mencionó en el primer mensaje, que no debemos desesperarnos por las pruebas, sabemos que tenemos un Dios todo poderoso y amoroso, junto con su Hijo Jesucristo, la cabeza de la iglesia, ellos están en completo control de las cosas. Y toda buena dádiva y don desciende del Padre de las luces, que no hay variación, Él es el mismo ayer, hoy y por los siglos, Dios siempre es generoso y misericordioso. Ahí nos dice eso en Santiago, capítulo 1, versículo 17.

Entonces, estas lecciones en el Antiguo Testamento, que también hay otra escritura más que menciona esta misma lección en primera de Corintios, capítulo 10, de 1 Corintios, versículo 11.

Nos dice, y estas cosas les acontecieron como ejemplos y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos. Fueron como ejemplos o se puede decir lecciones para nosotros. El siglo XII, así que el que piense estar firme, mire que no caiga, que no nos descuidemos en esta carrera hacia el reino de Dios, porque algunos no alcanzaron cruzar la meta. Y me refiero aquí a uno de los reyes, una figura trágica, porque comenzó muy bien, pero no terminó bien. Y Dios puso esto como un ejemplo para nosotros, para mantenernos firmes hasta el fin y mantenernos humildes hasta el fin, que no nos entre vanidad y orgullo y altibés de espíritu. ¿Quién es este rey del cual me refiero? Es uno que no se habla mucho a menudo, se llamaba el rey Uzias. ¿Y cuál fue su gran error? Es algo que se aplica en nuestras propias vidas. Y Uzias era un joven rey, comenzó a reinar a los 16 años. Se pueden imaginar los jóvenes que están escuchando este mensaje. A los 16 años le recayó sobre Uzias el gobierno de toda una nación. ¿Cómo manejarían ustedes esta situación si recayera esa autoridad sobre uno? Hay buenas enseñanzas al respecto para la juventud y para todo el resto de nosotros. Tal vez este error ya haya sucedido en nuestras vidas. Y si no nos hayamos arrepentido, quizás también las secuelas van a ser trágicas, como fue en el caso del rey Uzias. Vayamos entonces, tenemos dos relatos en la Biblia sobre el rey Uzias. Uno que es bastante corto, que se encuentra en segundo de Reyes 14 y 15. Y el más extenso se encuentra en el libro de Segunda Crónica, capítulo 26. Por eso vamos a empezar en segundo de Reyes, capítulo 14, versículo 1. Segundo de Reyes, capítulo 14, versículo 1.

Nos dice lo siguiente.

Aquí vamos a solamente hacer referencia al padre y el abuelo del rey Uzias. Dice versículo 1. En el año segundo de Joás, hijo de Joacás, rey de Israel, ese es la tribus del norte, nosotros estamos enfocando en las tribus del sur de Judá. Y se comenzó a reinar a Macías, hijo de Joás, rey de Judá. Entonces aquí tenemos a Joás, que era el abuelo de Uzias, y a Macías, su padre.

Y como vamos a ver, Uzias venía de un buen linaje de Reyes. El rey Joás, igual que el rey Amacías, como nos dice versículo 3, de segundo de Reyes 14, hablando aquí de Amacías, el padre de Uzias, y él hizo lo recto ante los ojos del eterno, aunque no como David, su padre, hizo conforme a todas las cosas que había hecho Joás, su padre. Entonces viene de Uzias de un muy buen linaje. Pero leamos en el versículo 17, ¿qué le pasó a Amacías, el padre de Uzias?

Versículo 17. Y Amacías, hijo de Joás, rey de Judá, vivió después de la muerte de Joás, hijo de Joacas, rey de Israel, 15 años. Reynó 15 años en Judá. Dice, los demás hechos de Amacías no están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Judá. A esto se refiere el libro de crónicas, que vamos a leer después. El siglo XIX conspiraron contra él en Jerusalén y él huyó al Lachis, pero le persiguieron hasta Lachis y allá lo mataron.

Lo trajeron luego sobre caballos y lo sepultaron en Jerusalén con sus padres en la ciudad de David. Entonces todo el pueblo de Judá tomó a Azarias, que se llamaría su nombre real, Uzias. Es decir, asumió un nuevo título. Y de hecho, aquí el nombre Uzias significa el Señor es fuerte.

Azarias, que era el nombre aquí que tenemos, se llama el Señor Ayuda. Entonces se le cambió su nombre una vez que asumió el trono. Dice versículo 21. Entonces todo el pueblo de Judá tomó a Azarias que era de 16 años. Era un adolescente y ahora tenía que reinar sobre el pueblo de Judá.

Y lo hicieron rey en lugar de Amacía, su padre. Redificó a Elat, que es la ciudad puerto, ahí en el colfo de Acaba. Es muy importante porque ahora Israel tenía acceso al Océano del Sur. Podía comerciar con toda la zona del Sur, con el África y hasta, bueno, la zona de Arabia.

Y hasta la India. Porque como vamos a ver, se volvió una potencia marítima. Y la recituyó a Judá después que el rey durmió con sus padres. Y nos dice en el capítulo 15, el segundo de Reyes. Y dice en el año 27 de Jero Boam, rey de Israel, comenzó a reinar a Sarías. Otra vez, como vamos a ver en el relato más largo de Segunda de Crónicas, 26, ahí se menciona su nombre como Uzias.

Y ahora, de 16 años y 52 años, reino en Jerusalem. Dios lo bendijo con un largo reinado. El nombre de su madre fue Hecolías, de Jerusalem. Aquí, normalmente, cuando los Reyes de Israel, la casa de Israel o la casa de Judá, cuando eran buenos Reyes, se menciona a la madre. Porque ya se da por sentado que el padre va a guiar a su hijo.

Pero si hay una buena y justa madre en la casa, eso fortalece a los hijos. Por eso las madres tienen una responsabilidad tan grande en su hogar. Uno de los proverbios nos dice que la mujer en la casa o puede edificar su casa o la puede destruir. Y ella tiene una gran influencia sobre los hijos y la trayectoria que tendrán en el futuro. Y dice, versículo 3, He hizo lo recto ante los ojos del eterno conforme a todas las cosas que su padre Amacías había hecho.

Con todo eso, los lugares altos no se quitaron. Es decir, todavía había una mezcla de balismo, de este sistema pagano. Dice porque el pueblo sacrificaba aún y quemaba incienso a lo en los lugares altos. Versículo 5, más el eterno, irió al rey con lepra y estuvo leproso. Hasta el día de su muerte y habitó en casa separada, hijo Tam, hijo del rey, tenía el cargo del palacio gobernando el pueblo. Aquí se ve la consecuencia de ese error trágico que vamos a leer más al respecto en unos momentos. Dice los demás hechos de Azarias y todo lo que hizo no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judas.

Y vamos a ir ahí en un momento más. Y durmió Azarias con sus padres y los sepultaron con ellos en la ciudad de David y reino en su lugar, Jotam, su hijo. Esta es la versión abreviada de la vida de Uzias. Pasemos ahora a Segunda de Crónicas, capítulo 26. Porque aquí sí tenemos mucho más detalles. Y aquí podemos ver con más claridad las lecciones que Dios quiere que nosotros aprendamos.

Dice Segunda de Crónicas, 26, versículo 1. Entonces todo el pueblo de Judas tomó a Uzias, después de que Amacias fue asesinado, el cual tenía 16 años de edad y lo pusieron por rey en lugar de Amacias, su padre. Otra vez, era un adolescente, no sabía mucho, pero hizo algo muy importante, que la juventud también debe hacer.

Versículo 2. Uzias herificó a Elot, que ya mencionamos el puerto sudeño en el golfo de Acaba, y la recituyó a Judas después que rey Amacias durmió con sus padres. Desde 16 años era Uzias cuando comenzó a reinar y 52 años reino en Jerusalén. El nombre de su madre fue Hecolías de Jerusalén, tal como ya se ha mencionado. Versículo 4. E hizo lo recto ante los ojos del eterno, conforme a todas las cosas que había hecho Amacias, su padre. Y noten aquí lo que Él hizo. Esta es la primera lección. Y persistió en buscar a Dios en los días de sacarias, entendido en visiones de Dios y en estos días en que buscó a el eterno, Él le prosperó. Aquí vemos que había un hombre justo. Se menciona en la Biblia. De hecho, después fue asesinado. Pero antes de ese tiempo, Él fue el instructor y el mentor del rey Uzias. Y por eso, una de las cosas buenas que hizo Uzias como un joven adolescente, Él no se tomó todo el cargo encima de sus hombros. Él buscó a consejeros.

Y nos dice la Biblia que en la multitud de consejeros está la sabiduría y está la seguridad. Entonces, mientras que era joven, Él se apoyó en Zacarias. Y Zacarias lo condujo por los caminos de Dios. Le dijo, esta es la forma de conducir al reino. Estas son las leyes de Dios que se aplican. Y un tributo a Uzias es que lo escuchó y puso por práctica estos principios bíblicos.

Y Dios dice que fue bendecido mientras que hizo todo esto. Dice Bercicoló 16 y salió y peleó contra los filisteos, que eran los gran enemigos de Israel que estaban tratando de conquistarlos. Desde la costa estaban subiendo al Altiplano, donde estaba Judá. Y él vino y rompió el muro de Gath y el muro de Hamniel y el muro de Asdod, que significa que dejó a esas ciudades indefensas, porque una ciudad sin muro es fácilmente invadida.

Entonces, con esto, él hizo que no hubiesen más ataques contra Judá. Y de hecho, como nos dice el comentario arqueológico IVP, dice, hay pruebas de que Asdod fue destruida alrededor de esa época, que se encuentran restos de la destrucción de los muros, y de hecho quedaron nulificados, anulados, de no poder atacar a Israel como lo habían estado haciendo. Dice, y edificó ciudades en Asdod y en la tierra de los filisteos. Así que él puso ahí su propio pueblo para controlar a los filisteos, como un tipo de guardia. Verso 7, Dios le dio ayuda contra los filisteos y contra los árabes que habitaban en Gurbán y contra los amonitas, mientras que uno obedece a Dios, va a ser bendecido.

Y hasta los enemigos no van a poder hacer nada en contra de ellos. Dios va a traerles paz y seguridad. Verso 8, y dieron los amonitas presentes a Ossía. Significa pagar un tributo, porque ahora sí respetaban a este rey poderoso y no querían ser castigados. Entonces le daban tributos, dinero, para mantener la paz. Y se divulgó su fama hasta la frontera de Egipto, porque se había hecho altamente poderoso.

Dios seguía con él, tal como lo había hecho con el rey David, uno de sus antepasados. Verso 9 edificó también Ossías Torres en Rusalén, junto a la puerta del ángulo, y junto a la puerta del valle, junto a las esquinas, y las fortificó. Israel estaba en constante peligro de todos estos pueblos paganos. Y bajo Ossías, Israel fue fuerte, y todos tenían invadirlos. Verso 10. Asimismo edificó Torres en el desierto.

De hecho, entonces fue más al sur, en la planicia que había ahí, y ahí él puso fuertes para proteger la retaguardia de Israel en el sur. Y abrió muchas cisternas. Entonces, esta zona árida de Cértica, él logró desarrollar agricultura, cabando pozos, estableciendo canales. Dice porque tuvo muchos ganados, y así en esa zona podían los pastizales crecer, y entonces desarrollar más la ganadería. Así, en la Céfela, que es la zona de la planicia, como en las vegas y viñas y labranzas, así en los montes como en los llanos fértiles, porque era amigo de la agricultura.

Miren qué hermosa descripción. Era un rey que amaba la tierra, que le gustaba la agricultura, que se preocupaba de alimentar a su pueblo. No tenía en suciar sus manos. Le gustaba andar en esas áreas y supervisar el desarrollo de la agricultura en Israel. Y Dior bendijo su esfuerzo. Dice el siglo XI.

Tuvo también un ejército de guerreros, lo cual salían a la guerra en divisiones, de acuerdo con la lista hecha por mano de Giel, Escriban, y de Macías, Gobernador, y de Jalanías, uno de los jefes del rey. Este es uno de los primeros casos en que tenían un ejército pagado y profesional. Antes eran puros reclutas, que no eran tan eficaces, pero como prosperó Israel en ese entonces, el pudo tener un ejército a este tiempo completo.

En el siglo XII dice todo el número de los jefes de familia, valientes y esforzados era 2.600. Y bajo la mano de estos estaba el ejército de guerra de 307.500 guerreros poderosos y fuertes para ayudar al rey contra los enemigos. Y pensé que en los antiguos detrambentos, todavía Dios permitía esto de la guerra. No había esa fe y el Espíritu Santo trabajando dentro de los israelitas.

Y por eso tenían que ellos mantener sus territorios protegidos. En el nuevo testamento eso cambia. En el siglo XIV, Yucías preparó para todo el ejército escudos, lanzas, yelmos, coseletes, arcos y ondas para tirar piedras. Aquí esta es otra innovación que hizo el rey Yucías porque antes la persona tenía que procurar sus propias armas, la tenían almacenadas en sus casas.

Pero ahora aquí había un ejército profesional y el rey era el que equipaba a todos para que todos tuviesen suficientes defensas y equipos. Yucías preparó para todo el ejército escudos, lanzas, yelmos, arcos y ondas para tirar piedras. Yucías hizo en el Usalén máquinas inventadas por ingenieros, de modo que había un desarrollo tecnológico en Israel. Yucías puso a hombres capaces de diseñar nuevas protecciones contra enemigos. Dice para que estuviesen en las torres y en los baluartes. Entonces, esto es una de las primeras defensas que hizo.

Y es muy interesante que en el tiempo posterior a esto, cuando los asirios invadieron a estas ciudades de Judá, y ya se habló de Lachis, que era una de las ciudades principales, que también Yucías fortaleció y desarrolló esta nueva tecnología, que todavía tenemos en el Museo Británico. Y yo lo he visto personalmente, que hay lo que se llama unos bajos relieves, que es un tipo de muro en que han grabado aquí la escena de guerra, cuando los asirios tomaron a Lachis interesantemente en esas torres de Lachis, donde estaban los israelitas, los judíos.

Encontramos unas plataformas que estaban arriba en los muros, y que estaban protegidas como un tipo de andamio portátil, que se establecía para que los arqueros pudieran lanzar sus flechas, 180 grados si era necesario. Y curiosamente, en ese escenario, ese tipo de grabación que se hizo en el muro del Palacio del Rey Sennacherib, que fue llevado después ese bajo relieve al Museo Británico, que se puede ver esos tipos de baluartes, esos tipos de andamios. Lo pueden ver, está en el internet. Pueden buscar ahí el sitio de Lachis, y ahí van a ver esos muros. Entonces, interesante como la arqueología confirma, que en esos tiempos, había nuevas formas de defender los muros.

Sígannos dice, y su fama se extendió lejos, porque fue ayudado maravillosamente hasta hacerse poderoso. Dios lo bendijo como este era un rey justo, que cumplía con la voluntad de Dios, cuidaba su pueblo, los alimentaba y los protegía. Pero aquí vemos ese error trágico que cometió Ucias.

Dice, más cuando ya era fuerte, su corazón se nalteció para su ruina, porque se reveló contra el eterno su Dios, entrando en el templo del eterno, para quemar incienso en el altar del incienso. Aquí tenemos un rey que entró en el templo, y entró en el lugar que solamente le correspondía a los sacerdotes.

Dice, versió 17, y entró tras él el sacerdote a Sarías, y con él 80 sacerdotes del eterno, varones valientes, porque aquí había un rey que era muy popular, muy poderoso, pero se había envanecido. Y ahora no era suficiente ser rey. Él también quería ser el sacerdote de su pueblo, el que quería asumir el mando religioso, aparte del manto secular que él tenía, el mando del gobierno. Versió 18, y se pusieron contra el rey Uzias, y le dijeron, no te corresponde a ti o Uzias, el quemar incienso al eterno, sino a los sacerdotes, hijos de Arón, que son consagrados para quemarlo.

Y eso se puede ver ahí en número 310, que nos habla al respecto, que eran sólo los sacerdotes que tenían esa autoridad. Y dice, sal del santuario porque has prevaricado, que significa pecado, y no te será para gloria delante del eterno. Dios, esto no va a ser bien visto por Dios.

Va a ser una abominación, un sacrilegio. Entonces, Uzias, teniendo en la mano un incensario para ofrecer incienso, que le correspondía sólo a los sacerdotes, se llenó de ira. Esto fue otro error gravísimo, que en vez de escuchar a los sacerdotes como mentores de él, como consejeros, tratando de hacer que evitara tan gran pecado, Él se endureció. Su corazón se endureció, se volvió por fiado, y se enojó. Los miró en poco. Decía, ¿quiénes son ustedes? Yo soy el rey. Ustedes están bajo mis cargos. Y dice aquí, se llenó de ira.

Y en su ira contra los sacerdotes, la lepra le brotó en la frente. Delante de los sacerdotes en la casa del eteno, junto al altar del incienso, Dios lo azotó con la terrible enfermedad de la lepra, en que la piel se vuelve escamosa y blanca. Y es una enfermedad que empieza a apodrir la piel de uno, y empieza a destruir todo el sistema de nervios en su cuerpo. El siglo XX le miró el sumo sacerdote a Sarías y todos los sacerdotes, y aquí la lepra estaba en su frente.

Y le hicieron salir apresuradamente de aquel lugar, y él también se dio prisa a salir, porque el eteno lo había herido. Ahora, ¿dónde está el orgullo? ¿Ahora dónde estaba el enojo? Él se dio cuenta que había cometido un gravísimo error, y tuvo que salir arrancando del templo. Sí, tal como nos dice...

Le puedo leer aquí, no tienen que ir específicamente, pero en proverbios, capítulo 16, versículo 18, proverbios 16, versículo 18, nos dice, antes del quebrantamiento es la soberbia, y antes de la caída, la altivés de espíritu. Y eso es exactamente lo que le sucedió a este rey, Euseas. Nos dice, versículo 21, así el rey Euseas fue leproso hasta el día de su muerte. Aparentemente, nunca se arrepintió. Fue separado, y ahí él estaba, amargado, humillado, pero igual no se arrepintió ante Dios, por lo que nosotros entendemos.

Aquí no sale. Y habitó leproso en una casa apartada, por lo cual fue excluido de la casa del eterno, ya ni siquiera podía ir a presentarse como rey afuera del templo, representando a su pueblo. Ni siquiera podía hacer eso, porque como leproso era algo contagioso, y que hoy día todavía existe ese tipo de lepra, y la persona vive en islas, en lugares aislados, porque es todavía contagioso. Dice, y Jotam, su hijo, tuvo cargo de la Casa Real gobernando al pueblo de la tierra. Los demás hechos de Euseas, primeros y posteros, fueron escritos por el profeta Isaías, hijo de Amos, que estaba en ese entonces, él podía haber acudido a Isaías, y durmió Euseas con sus padres, y los sepultaron con sus padres en el campo de los sepulcros reales, porque dijeron leproso es y reinojo, TAM, su hijo en lugar suyo.

Entonces, ni siquiera pudo estar ahí en las tumbas reales de los reyes, sino en un campo al lado. Es una triste historia, y por eso aquí hay cuatro lecciones que podemos aprender.

Cuatro lecciones de la vida de Euseas. Número uno, la importancia de tener un mentor, y sabemos que mientras que tenía a Zacarias, como su instructor, como un buen ejemplo, que podía corregirlo cuando fuera necesario, y él prosperó. Pero después que Zacarias murió, podía haber escogido a otros. Habían varios que estaban ese entonces, viviendo uno de ellos era Isaías, el profeta.

Yo cuando era más joven, tuve muchos mentores ahí en la institución ambasador. El señor Armstrong fue el mentor principal que tuve en ese entonces.

Y en los últimos 12 años, tuve un mentor por unos tres años que fue Dennis Luecker. Tuve la oportunidad de acompañarlos junto con mi esposa, Katy, y la esposa de Dennis Luecker, Lee Ann. Pudimos visitar a Chile y Argentina. Él fue un gran mentor mío, también Victor Kubeck. Y quisiera mencionarle el último mensaje que entregó Dennis Luecker antes de morir de una enfermedad de cáncer. Pero yo estaba en su casa, me había invitado, y él se presentó ante el Consejo de Ancianos, y esto fue filmado. Y él dijo lo siguiente, que me impactó mucho, todavía lo recuerdo. Siete razones espirituales, ¿por qué la Iglesia va a tener éxito en el trabajo que está haciendo? Vemos la atención, esa confianza, esa esperanza que tenías, Dennis Luecker, de que la Iglesia de Dios unida iba a prosperar y Dios la iba a bendecir. Entrego siete razones. La primera dice, porque amamos a Dios con todo nuestro corazón, y el amor de Dios nunca falta. En primer Ecolintios 13, dos al ocho, nos dice que el amor nunca falta. Número dos, porque enfocamos en Jesucristo nuestro Señor y Salvador para que nos quie. En Mateo 28, 18 al 20, Cristo dijo que estaré con vosotros hasta el fin del mundo. La tercera razón, porque estamos totalmente comprometidos a hacer la obra de Dios, mientras Él nos debe de la Iglesia. Somos personas comprometidas con Dios. Totalmente. Servirles como Él dispone a lo que Él desea. Debemos ser servidores M aquí. ¡Listos para servirlos! Igual que las madres lo hacen, la forma que crían a sus hijos, ellas también son servidores M aquí. Servidores M aquí, Señor. La cuarta razón, dice porque deseamos fuertemente crecer espiritualmente y amar verdaderamente a los demás. Deseamos crecer espiritualmente. Estamos aprendiendo, tal como los mensajes que reciben, son todas enseñanzas para nosotros, pero tenemos que ponerlas en práctica también. ¿Cuándo lo vamos a hacer? Acabamos de terminar la Pascua, Pan de Cinevadura, empezamos un nuevo año espiritual y tenemos que incorporar estos principios en nuestras vidas. La quinta razón que dio Dennis Lucker, dice por las fervientes oraciones y el apoyo de muchos hermanos alrededor del mundo, están constantemente orando, pidiendo a Dios que bendiga Su obra, que nos proteja, que nos muestre los caminos para predicar con más potencia y eficacia este Evangelio y a cuidar a los hermanos de la mejor manera posible. Y la séptima razón, no, la sexta razón, porque nuestros pastores son muy fieles y los cientos de ancianos y ministros que se mantienen firmes en la fe y en servir a los hermanos. Sí, tenemos un buen equipo para servirles el mundo. Y la séptima razón por el personal de trabajadores y simplemente talentosos y dedicados en las oficinas centrales. Tenemos un equipo maravilloso, que sigue el movimiento constante, la obra para adelante. Esas son las siete razones que me recuerda ese mentor mío Dennis Luke nos entregó. Esa es la primera lección, buscar buenos mentores para uno mismo. ¿Quiénes puede ser su guía si uno es un joven? ¿A quién va a acudir para que lo guíe, para que lo apoye en este camino de vida? ¿O lo van a tratar de hacer solo uno? ¿O quizás se van a envanecer o se van a dejar llevar por el mundo y perder la maravillosa oportunidad de servir a Dios, en su vida, en su familia, en su trabajo?

La segunda razón, elección que tenemos, Dios bendice a los que se someten totalmente a Él y obedecen sus santas leyes. Sí, vemos el ejemplo, mientras que Uzias siguió el camino de Dios, Dios lo bendijo, lo cuidó, lo engrandeció. Lamentablemente, a veces cuando Dios bendice demasiado a una persona, se echan a perder, se enorgullecen, se endurecen con las riquezas y con todo lo que es el mundo. Las riquezas pueden ser una bendición si la compartimos, si apoyamos la obra y la ponemos primero en nuestras vidas, pero no a nosotros mismos. La tercera lección es que recuerden que el éxito siempre es condicional. Uzias se envaneció por su éxito y asumió más autoridad de la que se le había entregado. Y por eso el éxito, igual que se le entrega uno, se le puede quitar y Dios lo puede hacer. Veanme, lo he hecho muchas veces. Muchas personas que se han envanecido, que dijeron que Dios siempre iba a estar con ellos y ese orgullo al final los tropezó y cayeron profundamente. Por eso no es sólo empezar bien en la fe que vale, sino terminar bien lo que realmente cuenta. Y la humildad es el antídoto al orgullo. Si queremos evitar el orgullo, entonces apliquemos la humildad en todo lo que hacemos. La cuarta lección, siempre hay lugar para el arrepentimiento. Eso también se comentó en el primer mensaje, que Dios, a pesar que disciplina, castiga, también perdona y vuelve a recuperar a la persona. Y parece que Uzias nunca lo hizo. Él podía haberse arrodillado ante Dios, haberle pedido perdón. ¿Quién sabe? Quizás la lepra no hubiera seguido. Leemos ahí en el libro de números. Me parece que es 12, donde María, la hermana de Moisés, cuando ella también habló en forma irresponsable y todo, le llegó la lepra y después fue removida cuando ella se arrepintió. Pero Uzias parece ser que era demasiado orgulloso para arrepentirse. Pero otros reyes se arrepintieron. David lo hizo y fue restaurado. Robó a él hijo de Salomón. Saben que tuvo muchos problemas, igual se arrepintió y Dios lo tomó en cuenta. Uzias también fue perdonado, incluso con el rey Ezequías, que iba a morir y Dios tuvo misericordia, escuchó su oración y le extendió su reinado por 15 años más. En manos hemos repasado la vida de este rey Uzias. Ya hay muchas lecciones que aprender y ahora podemos aplicarlas en nuestras propias vidas. Contestemos las siguientes preguntas. Buscamos a un buen mentor para guiarnos cuando hay una decisión importante que tomar especialmente en el ámbito espiritual. Consultamos con un mentor, pero también, una decisión importante. Consulten con su padre, consulten con alguien que tiene esa experiencia para ayudarlos. Creemos realmente que Dios nos bendice. Si nos sometemos completamente a Él, otra vez el primer mensaje tiene que ver con eso. De no desanimarnos, porque tenemos un Dios muy amoroso y generoso y que nos escucha, a pesar de que a veces nos dice todavía no, hijo o hija mía. No es tiempo todavía para intervenir. Otra pregunta, ¿evitamos enorgullecernos o somos fáciles enaltecernos? Es decir, ¿somos humildes ante los demás? O no. Y finalmente, creemos que siempre hay lugar para arrepentimiento, aunque hayamos cometido un error grave. Estamos dispuestos a aceptarlo, a confesarlo ante Dios y arrepentirnos y cambiar de rumbo. Eso es lo más importante. Por eso, nuestra vida espiritual puede depender de cómo contestamos estas preguntas. Porque Dios bendice, pero también el hombre se puede enaltecer. Y no dejemos que nos suceda nosotros lo que le sucedió a este buen rey de Judá que se enorgulleció y que se enojó y que se endureció y cometió un error fatal. El rey usía.

Estudió en Ambassador College por cuatro años, titulándose en Teología y Español y comenzó su ministerio en 1976. Es un escritor de Las Buenas Noticias, enseña en Ambassador Bible College y actualmente forma parte del Consejo de Ancianos de la iglesia. Además es Pastor Coordinador de las áreas hispanas y viaja continuamente visitando las congregaciones. Vive actualmente junto a su esposa Caty Seiglie en Anaheim y pastorea la congregación de Orange County, California. Tiene cuatro hijas y ocho nietos.

Nació en La Habana, Cuba, y llegó a Estados Unidos cuando tenía 7 años de edad. Después de vivir siete años en Miami, Florida, su familia se trasladó a Murphy, Carolina del Norte.