#002 - Génesis 1:1: "En un principio creó Dios los cielos..."

Usted está aquí

#002 - Génesis 1:1

"En un principio creó Dios los cielos..."

Descargar
02genesis11_1 (205.45 KB)

Descargar

#002 - Génesis 1:1: "En un principio creó Dios los cielos..."

02genesis11_1 (205.45 KB)
×

Después de aclarar los puntos sobre Dios, lo siguiente que viene tiene que ver con el término “los cielos”.

Noten que dice “cielos”, en el plural, y no cielo. Esto indica que hay más de un cielo, algo poco entendido aún por los estudiosos bíblicos.

No obstante, el hecho de que existen varios cielos es manifiesto por toda la Biblia. Hasta el apóstol Pablo le da una enumeración al mencionar uno de esos cielos, el tercero: “Conozco a un hombre en Cristo que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé; Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo” (2 Corintios 12:2).

De hecho, hay tres cielos descritos en la Biblia. El primer cielo corresponde a la atmósfera de la Tierra donde llueve (Génesis 7:11; 8:2; Deuteronomio 11:17), donde vuelan las aves (Génesis 1:20; 7:3; Apocalipsis 19:17) y también están las nubes (Mateo 24:30).  El segundo cielo abarca todo el Universo físico, es decir, nuestro sistema solar, las estrellas y las galaxias (Génesis 1:14-17; 15:5; Deuteronomio 4:19; Hebreos 11:12). El tercer cielo es la morada actual de Dios (2 Corintios 12:4; Mateo 6:9; Marcos 16-19). Sabemos que está al norte de la Tierra (Isaías 14:13). La Nueva Jerusalén descenderá de ese tercer cielo al culminar el plan de salvación del hombre (Apocalipsis 21:2). Es interesante notar que Cristo cruzó los tres cielos cuando ascendió al trono de Dios después de su resurrección: “Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión” (Hebreos 4:14).

Ahora bien, antes que Dios creara el Universo, fueron creados los ángeles que moran en el tercer cielo con él (Nehemías 9:6; Marcos 13:32). Son seres inmortales (Lucas 20:36) y no tienen órganos reproductivos (Mateo 22:30). Hay “millones de millones” de ellos (Apocalipsis 5:11) y sabemos que una tercera parte se rebeló bajo el mando de uno de los tres arcángeles, llamado Lucero o Lucifer, que significa “Ángel de Luz” (Isaías 14:12; Apocalipsis 12:3-4, 7-9). Este arcángel, Lucifer, se convirtió en un “Ángel de Tinieblas” y cambió su nombre a Satanás o “'El adversario” y también se llama, diablo, o “El Calumniador” (Apocalipsis 20:2).

La tercera parte de los ángeles que le siguieron se llamarían demonios o “deidades menores” (Levítico 17:7; Mateo 9:34) que gobiernan las tinieblas del reino de Satanás (Efesios 6:12).

El Verbo, que se convirtió en Cristo, vio a Satanás caer del cielo tras el fracaso de su rebelión (Lucas 10-18). Como consecuencia de su sublevación contra Dios, Satanás y sus ángeles caídos perdieron sus puestos o moradas en el tercer cielo y ahora están sujetos a la Tierra (Judas 1:6; Job 1:7). Aparentemente, Satanás aún tiene acceso al tercer cielo (Apocalipsis 12:10) pero, en general, todos están restringidos a la Tierra. Sin embargo, tienen la posibilidad de influir sobre las actitudes humanas (Efesios 2:1-3; 4:27) y hasta pueden poseer a los que libremente les dan cabida (Lucas 4:33; 9:42). Los otros dos arcángeles son identificados como Gabriel (Daniel 8:16; 9:21; Lucas 1:19,26) y Miguel (Daniel 10:13; 12:1; Judas 1:9; Apocalipsis 12:7).

Hay tres categorías de ángeles. Están los querubines, que tienen una cabeza, de cuatro rostros y tienen cuatro alas (Ezequiel 10:20-22). Luego están los serafines con seis alas (Isaías 6:2; Apocalipsis 4:6-8) y finalmente, los ángeles comunes que no tienen alas y parecen como un hombre (Mateo 28:2; Marcos 16:5; Hechos 1:10). Aparte de esto, hay caballos angelicales (2 Reyes 2:11; Apocalipsis 19:11,14) y muchos objetos espirituales (Apocalipsis 1:12,13; 4:1-5).

Creemos que estos ángeles fueron creados antes del Universo porque ellos presenciaron la creación de la Tierra (Job 38:4-7). Toda la evidencia física y bíblica indica que la Tierra es muy antigua, como el resto de la creación (Génesis 1:1; 2:1). La Biblia habla de la creación del querubín Lucero (Ezequiel 28:14-15) y esto indica que los ángeles no han existido eternamente. Estos fueron hechos para servir a Dios y a sus futuros hijos (Hebreos 1:13-14). En resumen, hay tres cielos mencionados en las Escrituras. También se revela que existen cinco formas y niveles de vida en el Universo:

  1. LA VIDA VEGETAL
  2. LA VIDA ANIMAL
  3. LA VIDA HUMANA
  4. LA VIDA ANGELICAL
  5.  LA VIDA DIVINA

Es interesante entender que hay dos cambios posibles en estas etapas. Primero, sabemos que una vida divina se convirtió en humana (Juan 1:1-3,12-14; Filipenses 2:5-9) y luego volvió al quinto nivel.

También el propósito de ese sacrificio fue el poder permitir que el tercer nivel de los seres humanos pudiese trascender hasta el quinto nivel (Juan 10:34; Romanos 8:29; Hebreos 2:5-13) y convertirse en parte de la familia de seres divinos, “Elohim”.

Esto, por ejemplo, es lo más importante que se debe saber sobre la creación de los ángeles y los cielos.