BREXIT
¿Qué significado tiene para usted?
Desde que Gran Bretaña decidió por votación abandonar la Unión Europea el 23 de junio de 2016, los grandes interrogantes han sido: ¿Qué significará esto para los británicos, para la UE e incluso para los Estados Unidos y su relación con el Reino Unido y con Europa?
El impacto inmediato de la decisión ha sido la fluctuación monetaria, la crisis bursátil y una gran cantidad de especulaciones sobre el futuro papel de Gran Bretaña en la economía global y su histórica posición de liderazgo.
Los estudiosos de la profecía bíblica también se han preguntado qué podría significar esto para el mundo considerando lo que predice la Biblia acerca de los eventos que conducirán al fin de esta era. Esta es una de las preguntas que más preocupan a los lectores de la revista Las Buenas Noticias.
A lo largo de los años hemos explicado en detalle lo que la Biblia llama Babilonia, un gran poder religioso y político que surgirá para dominar el mundo poco antes de la segunda venida de Jesucristo. Hemos demostrado que las raíces modernas de este futuro sistema se encuentran en la actual Europa. La historia cultural y espiritual de esa región indica de dónde surgirá ese poder profetizado.
En la Biblia, el libro de Apocalipsis describe este poder en términos que no dejan dudas de que el mundo será controlado por este sistema, que mantendrá ilusionadas a las naciones con promesas de orden y prosperidad. Nuestro folleto El Apocalipsis sin velos describe en forma global la magnífica profecía de esperanza revelada en el último libro de la Biblia. Pero previo a ello deben tener lugar ciertos sucesos que irán preparando el ambiente, y vemos que ya empiezan a ocurrir en el mundo actual. A continuación presentamos un breve resumen.
Una mujer y la bestia
Apocalipsis 17 empieza con la descripción de una mujer vestida de púrpura y escarlata, montada sobre una bestia de aspecto feroz, con múltiples cabezas y cuernos. En la frente de la mujer hay un nombre: “babilonia la grande, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra” (v. 5). La mujer está ebria de la sangre de los santos y mártires de Jesucristo. Esta mujer simboliza un gran sistema religioso que se opone a Dios y su pueblo.
La bestia sobre la que cabalga la mujer se describe en otras partes de la Biblia en términos que encajan con sistemas políticos muy poderosos que a través de la historia han controlado grandes partes del mundo. El profeta Daniel vio esas imágenes durante el exilio en Babilonia, y estas se repiten en el libro de Apocalipsis.
En su visión, el apóstol Juan ve una bestia con muchas cabezas y cuernos que surge de entre las naciones. Menciona “reyes”, o líderes de Estado, que dan su poder durante un tiempo a un solo líder también llamado “la bestia” (v. 12). Aunque por un tiempo se producen beneficios y cooperación mutuos entre el poder religioso representado por la mujer y el poder político representado por la bestia, la relación no termina bien. La bestia se vuelve contra la mujer y acaba con su poder, y luego hace guerra contra el Cordero, Jesucristo. Este sistema incluso se enfrentará a él en su venida.
El engaño espiritual generalizado que se explica aquí no tiene precedentes. Daniel describe un tiempo de angustia mundial como nunca se ha visto en la historia humana (Daniel 12:1). Incluso Jesús advirtió a sus discípulos sobre una época de engaño que podría llevar por mal camino a los elegidos de Dios, su Iglesia (Mateo 24:24).
El libro de Apocalipsis señala a Satanás como el artífice de este engaño, quien se vale de tres espíritus poderosos que operan a través de sus principales secuaces humanos en el tiempo del fin: la bestia y el falso profeta. El llamado a defender el orden mundial corrupto creado por este sistema, conocido como Babilonia, reunirá a las potencias militares del mundo en una batalla final contra Dios al momento de la aparición de Cristo (Apocalipsis 16:13-14).
Los eventos y el escenario de lo que va a ocurrir superarán cualquier titular de prensa actual. De hecho, incluso superarán los más creativos escenarios de catástrofes apocalípticas concebidos por Hollywood o los mejores escritores de suspenso.
Los hechos históricos solo pueden darnos indicios débiles que nos ayudan a discernir su significado. La clave para entenderlos es la Palabra de Dios y su Espíritu Santo. Es necesario someterse a Dios, como hicieron los antiguos profetas, para entender los tiempos y lo que él está haciendo.
La profecía bíblica ofrece impresionantes detalles de los eventos cruciales en la historia relacionados con su plan de salvación para la humanidad. Para llegar a entenderlos, podemos empezar a discernir los acontecimientos de nuestro tiempo y su significado, y hacia dónde nos dirigimos en el desarrollo de este plan.
Para comprender a dónde se encaminan los eventos del mundo de hoy, debemos mantener nuestra atención en la esperanza y el conocimiento que encontramos en la Palabra de Dios.
Brexit — ¿qué ocurrió?
La decisión de Gran Bretaña de abandonar la Unión Europea, compuesta de 28 miembros y de la cual había sido parte por más de 43 años, sorprendió al mundo entero, inclusive a los votantes británicos.
Los noticieros y comentaristas quedaron perplejos y confundidos durante varios días tratando de explicar lo sucedido, por qué pasó y lo que significaba. Aún ahora, queda mucho por descubrir sobre el impacto de la salida de Gran Bretaña del mayor bloque comercial del mundo.
El resultado de la votación provocó la inmediata dimisión del primer ministro británico, David Cameron, quien había dirigido el fallido intento de permanecer en la Unión. El 13 de julio, Theresa May formó un nuevo gobierno y declaró sus intenciones de comenzar el difícil proceso de separar a Gran Bretaña de la UE, lo que podría tardar varios años.
Inmediatamente después de la votación, el valor de la moneda británica (la libra) cayó en picada. Londres ha crecido hasta convertirse en el centro financiero de Europa. ¿Comenzarán las empresas a trasladar sus operaciones fuera de Gran Bretaña para mantener una ventaja competitiva en la economía global? ¿Qué va a suceder con el comercio entre Gran Bretaña y otros miembros de la UE? Muchas preguntas siguen sin respuesta.
Pero la mayor incógnita es saber qué sucederá con la propia UE. La Unión ha tenido que enfrentar otras crisis en los últimos años, tales como la difícil situación económica de países miembros, como Grecia e Italia por ejemplo. También ha tenido problemas para manejar la agresión e intransigencia de Rusia a lo largo de sus fronteras orientales.
Sin embargo, lo más difícil ha sido la avalancha de más de un millón de inmigrantes de Siria, Irak, Afganistán y el norte de África. Los violentos conflictos en Oriente Medio, sumados al caos y la pobreza en el norte de África, han provocado que una gran multitud de personas lleguen a la UE en busca de asilo y una vida mejor.
El carácter masivo de esta inmigración ha afectado particularmente el entramado social de Alemania, Austria y Hungría. Esto beneficia a los movimientos políticos de derecha de estas naciones, que se alimentan de los temores de aquellos que sienten que su cultura, estabilidad financiera y futuro se hallan amenazados por extranjeros de culturas muy distintas y perspectivas de vida completamente diferentes.
Los ataques terroristas de islámicos radicales y el veloz aumento de crímenescometidos por inmigrantes se suman a la incertidumbre de la vida. Los electores británicos que votaron a favor de dejar la UE puntualizaron que los problemas migratorios fueron un factor determinante en su deseo de retirarse y cerrar la puerta tras de sí.
La reacción de la UE ante cada uno de los puntos de la crisis ha carecido de visión y determinación. Y ahora, un destacado participante de la Unión ha decidido seguir por su cuenta. Se especula que otros países de la UE podrían convocar a plebiscitos para decidir si permanecerán o no como miembros. La UE actual ha cambiado y, sin duda, seguirá cambiando.
Un mundo en proceso de aislamiento
La decisión de Gran Bretaña de encerrarse en su isla es un ejemplo de lo que ocurre en otras partes del mundo. La marcha hacia un orden mundial, un mundo sin fronteras, asusta a la gente.
Mientras que las personas con niveles de ingresos más altos se han enriquecido aún más, los que pertenecen a niveles de ingreso medio y bajo se han estancado o empobrecido. Millones de personas han sido despedidas de sus empleos, y comunidades enteras han cambiado para siempre. Además del gran cambio cultural y moral, está la preocupación de las personas por lo que les depara el futuro. El miedo y la incertidumbre están detrás no solo del brexit, sino también de la campaña presidencial estadounidense y otros conflictos culturales.
La decisión británica de abandonar la UE debe entenderse dentro de un marco histórico más amplio. A Gran Bretaña siempre la han afectado los asuntos del continente europeo, pero a la vez ha habido en su interior un comportamiento y visión del mundo distintos.
La historiadora Margaret McMillan escribió sobre esto en el periódico Financial Times: “Los británicos, al igual que todos los europeos, han sido parte de una civilización europea común. Las ideas, los bienes, los gustos y las modas se han diseminado mediante una red de comercio y comunicaciones durante siglos. Incluso antes de que el emperador Claudio hiciera de Gran Bretaña una colonia romana, los británicos ya habían adoptado costumbres de los romanos y comerciaban con ellos. La invasión normanda produjo lo que ahora consideramos la tradición británica aristócrata, además de castillos y catedrales” (Britain and Europe: The Ties That Bind [Gran Bretaña y Europa: Lazos que unen], 8 de julio de 2016).
La realeza inglesa una vez gobernó partes de Francia. Cuando se necesitó un nuevo rey en el tiempo de la gloriosa revolución del siglo XVII, los ingleses dirigieron su atención a la Casa de Orangeen los Países Bajos (Holanda). Y la actual Casa de Windsor, a la que pertenece la Reina Isabel II, fue llevada a Gran Bretaña desde Alemania, habiendo compartido ancestros con la familia real en Inglaterra.
Los lazos entre el continente e Inglaterra han sido fuertes y consistentes, a pesar de que esta desarrolló una cultura anglosajona diferente a través de la ley, el lenguaje y la tradición. Inglaterra siguió un rumbo distinto durante el período de la colonización, que se extendió por Europa en el siglo XV.
A través de las generaciones, Gran Bretaña procuró evitar que cualquier potencia continental dominara a todas las demás naciones. Esta fue la razón por la cual Inglaterra lideró una coalición para poner fin a las ambiciones de poder mundial de Napoleón, en Waterloo. Debido a estas alianzas fue que Inglaterra se involucró en las dos guerras mundiales del siglo XX.
La actual UE es en parte el resultado de la visión para prevenir guerras futuras gracias a la preservación de la unión económica. Pero ese sueño ahora se ve amenazado por la salida de Gran Bretaña de la comunidad.
La idea de Europa
El concepto de Europa, lo que es y lo que son sus límites, ha cambiado a través de las edades. En la época romana Europa se centraba en el Mediterráneo, al que los romanos llamaban Mare Nostrum o “Nuestro Mar” y abarcaba el continente moderno, África del Norte y gran parte del actual Oriente Medio, llegando hasta el Golfo Pérsico. La percepción de lo que era Europa y sus fronteras solo cambiaron después de la aparición del Islam, cuando la cultura europea fue expulsada.
Durante la Edad Media y hasta la época moderna, Europa estuvo dominada por la unión iglesia-estado llamada el Sacro Imperio Romano. Este sistema se derrumbó después de la derrota de Napoleón. Con la caída de los imperios (ruso, Habsburgo, Hohenzollern, otomán) después de la Primera Guerra Mundial, ha habido una pausa en este patrón histórico.
La configuración actual de Europa y del Oriente Medio, ambos creados después de las dos guerras mundiales, está pasando por un período tenso y difícil. La guerra, la migración masiva, la globalización y, en particular, el cambio de posición e influencia de Gran Bretaña y los Estados Unidos, está provocando un gran impacto.
La salida del Reino Unido de la UE es una elocuente declaración en contra de la globalización, que diluye la identidad nacional. En Inglaterra muchos temen que la nación esté cambiando tanto, que llegue a ser irreconocible. En muchos sentidos, esto es cierto. Lo mismo puede decirse de los Estados Unidos. El terrorismo, la inmigración incontrolada y la eliminación de las fronteras tradicionales del comercio, la economía y la cultura han creado un nuevo mundo que inquieta a muchos.
En estos momentos el mundo está pendiente de lo que suceda en Europa. ¿Cómo van a reaccionar Alemania y Francia, las dos naciones más grandes? ¿Abandonarán la Unión otros países? ¿Se reagrupará la actual UE para convertirse en un grupo más pequeño –aunque más fuerte– de naciones, con el objetivo de seguir adelante con una política más afín de unidad militar y económica? ¿Qué los llevará a unirse más estrechamente que antes? ¿Hay algún indicio en la profecía bíblica?
Algunos consideran que la clave para una unión más cercana entre los Estados europeos es el elemento espiritual: la religión. El comportamiento histórico es un precedente para esto, lo que nos lleva de nuevo al tema de Babilonia.
El sistema político-religioso que la Biblia llama “babilonia la grande” surgirá de entre las naciones del mundo en un momento de crisis mundial. El orden establecido se verá amenazado. El colapso económico podría acabar con años de trabajo y esfuerzo. Los líderes mundiales, no dispuestos a permitir que ello ocurra, se reunirán para crear lo que esperan sea la solución a los conflictos, el temor y un futuro incierto.
Apocalipsis 17:12, donde habla de los 10 gobernantes que le entregarán su poder y soberanía a un personaje, supone un momento crítico para la consolidación del poder. Ante la proclamaciónde “paz y seguridad” la gente se preguntará qué significa eso (1 Tesalonicenses 5:1-6). Pero aún no hemos llegado a ese punto.
El mensaje que ha enviado Gran Bretaña con su voto brexit es un “no” rotundo a continuar cooperando con un creciente sistema supranacional que busca conformar un modelo de unidad global. El objetivo actual de la UE es una unión de naciones sin fronteras, en la que inmigrantes, trabajadores y cualquier persona puedan viajar, trabajar y vivir. La UE busca un orden mundial que cambie la actual idea de las naciones-estado. Sus luchas recientes reflejan el inmenso desafío que presenta este ideal, dado el hecho que la mayoría de la gente quiere seguir siendo francesa, austriaca, griega o británica.
En Génesis 11, la intención de los hombres era construir una ciudad y una torre, y tener un mismo nombre para evitar ser esparcidos por toda la Tierra (versículo 4). Dios vio que si esto seguía, el género humano alcanzaría un punto crítico más rápidamente de lo que él había planeado, así que dispersó a la gente de ese entonces y confundió sus lenguas (versículo 7).
El lugar de esta antigua utopía se llamó Babel, y fue el comienzo de la aspiración humana de crear un mundo aparte en oposición a Dios. Babel también se llama Babilonia, una ciudad y un imperio que ha sido a través de los siglos la antítesis de todo lo que Dios planeó y se propuso hacer en la Tierra. Babilonia reaparece en Apocalipsis 17 como una gran manifestación final de oposición a Dios. Sorprenderá al mundo y llegará a su fin al ser derrotada cuando regrese el Señor.
¿Y qué hay de usted?
En Apocalipsis 18:4-5 hay un mandato de Dios que nos concierne a todos: “Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades”. Esta manifestación final de Babilonia se está formando hoy y hará su aparición en el momento que Dios determine, a medida que se desarrollen los eventos del tiempo del fin.
Para la mayoría de nosotros esto es difícil de imaginar. Vivimos en una época de grandes riquezas y maravillas tecnológicas. En nuestro mundo globalizado hay innovaciones, comodidades y placeres que hacen la vida agradable, emocionante y gratificante. El reto para el pueblo de Dios es andar por este mundo sin dejarse absorber por su seducción y engaño.
Dios dice que los pecados de Babilonia “llegan al cielo” y que no los pasará por alto (versículo 5). Babilonia va a crecer en poder y lujo, pero de repente, prácticamente en una noche, colapsará por el juicio final de Dios (versículos 7-9).
Para el pueblo de Dios será difícil discernir esto sin la visión espiritual y el poder que él ofrece. Puede estudiar estos pasajes en relación con la historia de Babilonia para que logre comprender mejor el tema. Babilonia es retratada en la Biblia como la cabeza de oro en el sueño de Daniel 2. La religión y la cultura de Babilonia han migrado a través de la historia, manifestándose en los imperios persa, griego y romano. Las raíces de Babilonia están vivas y esperan el día en que saldrán a luz, a plena vista de todo el mundo.
¿Cómo saber cuándo sucederá esto? ¿Cómo evitar la engañosa seducción del sistema y no unirse a él espiritual o culturalmente? Esto será un reto para todos nosotros. ¡El mensaje que Cristo nos entrega es que discernir las señales de los tiempos nunca ha sido más importante!