¿Por qué hay grupos de creyentes que utilizan diferentes calendarios?
El pueblo judío, desde tiempos del Antiguo Testamento, fueron quienes preservaron el calendario de Dios, habiendo sido transmitido a los sabios en una cadena continua desde tiempos de Moisés. Este calendario está determinado por el cálculo de una combinación de movimientos solar y lunar, en oposición al calendario romano, el cual se rige solamente por el movimiento solar. El calendario hebreo es sorprendentemente exacto. Los siguientes datos ilustran su exactitud. De acuerdo a los antiguos cálculos, el tiempo exacto entre una luna nueva y la siguiente es de 29 días, 12 horas, y 793 partes de una hora. La hora se compone de 1080 partes. En otras palabras, un mes lunar tiene 29,53059 días. Es interesante que de acuerdo a la NASA, el tiempo entre una luna nueva y la siguiente sea de 29,530588 días. Por supuesto que la NASA tiene a disposición las más avanzadas y sofisticadas computadoras del mundo. Sin embargo, la diferencia entre lo establecido por la NASA y el utilizado por Hillel II, el cual se originó hace más de 3000 años, es de apenas 0.000002 o bien dos millonésimas de día, calculado para el periodo de un mes.
También es importante señalar que el plan de salvación de Dios, se encuentra de acuerdo a la inspiración de su calendario, es decir que Dios no se manifiesta a través del calendario gregoriano, sino a través del calendario sagrado, en cada una de sus profecías pasadas, presentes y futuras.
Por supuesto que desde los tiempos de Cristo, la Iglesia de Dios ha conservado el mismo calendario sagrado luni-solar, donde 19 años solares suman exactamente 235 meses lunares, y para mantener exacto el pequeño excedente de la fracción de los meses lunares, se intercalan 7 meses designados como los grandes o segundos Adares, en periodos de 19 años solares.
Por esa razón, la Iglesia de Dios Unida, se rige por el mismo calendario manteniendo inclusive los nombres de los meses en el idioma hebreo, debido a que encierran mucho significado, y dentro de los cuales se encuentran inmersas las Fiestas Santas de Dios, las cuales forman las siete etapas de su maravilloso plan de salvación para el ser humano.
Para su información, dos son los métodos de cálculo que determinan el control del transcurso del tiempo, el primero es con la ayuda de un programa específico y el segundo, mediante un cálculo matemático de números complejos de base “7”. Con ambos métodos, es relativamente fácil establecer el tiempo exacto para cualquier año.
En cambio, el calendario gregoriano que se encuentra en actual vigencia, es producto de una corrección del anterior calendario juliano establecido por el emperador Julio César. Dicha corrección se realizó en tiempos del papa Gregorio XIII, durante el mes de octubre del año 1582, debido a una recomendación de los astrónomos de entonces, quienes vieron que el calendario juliano se encontraba desfasado en relación a las estaciones del año. Pero aun así, el mismo calendario gregoriano de hoy, continúa siendo inexacto.
Finalizamos comentando que nosotros desconocemos el tipo de calendario que posiblemente utilizan otros grupos religiosos.