¿Por qué Dios permitió que fuera abusado(a) sexualmente?: ¿Qué hice para merecerlo?

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¿Por qué Dios permitió que fuera abusado(a) sexualmente?

¿Qué hice para merecerlo?

Dios no deseó que sufriera de un abuso sexual, pero lo ha permitido. Él no interviene en la mayoría de los casos en los que los inocentes sufren, ni detuvo a quién abusó de usted. Pero ¿Por qué no lo hizo? ¿Por qué no simplemente intercede y detiene a quienes cometen actos violentos?

La respuesta inicia con el entendimiento de que el sufrimiento en el mundo es el resultado del pecado. Mucho de ese sufrimiento es infligido hacia otros por parte de quienes están violando las leyes de Dios. Por ahora, Dios permite que esto continúe para que la gente note cuan terrible es realmente el pecado.

El Eterno tiene un plan para finalmente remover al pecado por la eternidad. Y eso necesita un cambio en el corazón de las personas. Sobre todo del tipo de corazón del que provino el ataque del que fue víctima. Jesucristo dijo "Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios… las maldades… la lascivia" (Marcos 7:21-22).

El plan de Dios que se encuentra en curso, es restaurar el corazón de toda la humanidad. El proceso concluirá una vez que Jesucristo regrese a la Tierra, cuando los que estén dispuestos a hacerlo lo acepten como su Salvador y Maestro. Entonces toda la humanidad finalmente dejará de pecar, y no habrá más dolor ni sufrimiento. Este es el tipo de mundo que está por venir.

Hasta entonces, incluso mientras sufre el dolor de haber sido abusado o abusada, Cristo le ofrece aliviarlo de su dolor. Él dijo que su Padre le había "enviado a sanar a los quebrantados de corazón" (Lucas 4:18). También: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. " (Mateo 11:28). Puede echar “toda [su] ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de [nosotros]” (1 Pedro 5: 7).

Dios sabe lo que le ocurrió y le ofrece consuelo ahora para ser sanado o sanada de su dolor. Y puede tener certeza de que tiene un plan para no permitir que la agresión sexual suceda más.