¿Guardó Abraham los mismos mandamientos que Dios le dio a Moisés?

Usted está aquí

¿Guardó Abraham los mismos mandamientos que Dios le dio a Moisés?

Descargar

Descargar

¿Guardó Abraham los mismos mandamientos que Dios le dio a Moisés?

×

Muchos maestros religiosos dicen que los mandamientos dados por medio de Moisés se aplicaban únicamente a la antigua Israel y no a nosotros en la actualidad. Pero al llegar a esta conclusión, la mayoría pasa por alto el significado de lo que Dios dijo acerca de la obediencia de Abraham cientos de años antes de que hablara con Moisés en el monte Sinaí: “Por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes” (Génesis 26:5).

Las palabras hebreas que Dios utiliza en este versículo son muy importantes, como lo explica el Expositor’s Bible Commentary [“Comentario bíblico del expositor”]: “El Señor luego agregó un comentario muy relevante: Abraham ‘guardó mi precepto [mismarti], mis mandamientos [miswotay], mis estatutos [huqqotay] y mis leyes [wetorotay]’ (v. 5). Lo impresionante es que esta es precisamente la forma en que se expresa la obediencia al pacto del Sinaí en Deuteronomio 11:1: ‘Amarás, pues, al Eterno tu Dios, y guardarás sus ordenanzas [mismarto], sus estatutos [huqqotayw], sus decretos [mispatayw] y sus mandamientos [miswotayw], todos los días’ . . .

“Así, Abraham es un ejemplo de uno que demuestra que tiene la ley escrita en su corazón (Jeremías 31:33). El escritor lo muestra como el ejemplo máximo de verdadera obediencia a la ley, aquel del cual el Señor pudo decir: ‘Abraham obedeció mi voz’ (v. 5). Al mostrarnos a Abraham como un ejemplo de alguien que ‘guardó la ley’, el escritor nos ha mostrado la naturaleza de la relación que existe entre la ley y la fe. Abraham, un hombre que vivió por fe, podría ser descrito como aquel que guardó la ley” (1990, 2:186-187, énfasis añadido).

Abraham obedeció las mismas leyes espirituales fundamentales que le fueron dadas más tarde a Israel. Sin embargo, las ceremonias y ritos simbólicos que se llevaban a cabo en el tabernáculo, y las leyes administrativas nacionales de Israel, no se aplicaban en la época de Abraham. Tampoco son necesarios para los cristianos en la actualidad, porque un templo físico no es ya el centro de nuestra adoración como lo fue en la antigua nación de Israel (Juan 4:19-21; Hebreos 9:9-10).

Así, Abraham sabía mucho más acerca de lo que define y cuáles son los requisitos de Dios para un comportamiento justo, de lo que muchos maestros religiosos reconocen en la actualidad. También significa que las leyes que definen las actitudes y el comportamiento justos que fueron dadas a Israel, eran conocidas y practicadas por los siervos de Dios mucho antes de que se celebrara el pacto del Sinaí.