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¿Te sientes solo, perdido o abandonado? ¿Sabe Dios por lo que estás pasando? La historia de Agar nos da esperanza.
[Steve Myers] En un BT Daily anterior hablamos acerca de un pasaje que se enfocaba en ver a Dios en nuestras vidas. Sabes, también funciona al reverso, que Dios nos mira aun cuando no nos damos cuenta de que él nos observa. Hay un buen pasaje que nos lo recuerda en el libro de Génesis.
En Génesis 16, empezando alrededor del verso 6. Es una situación entre Abraham, Sara y Agar, su sierva. Sara la trata de manera brusca y la envía lejos. Agar huye de su presencia. Parecía que ella y su hijo Ismael morirían pronto. Estaban en la intemperie. Sin agua. Su destino estaba sellado, así parecía. Aun así, ella oró a Dios, un ángel se le aparece y, al fin, al levantar la cabeza, ve un pozo. ¡Agua! Ella se da cuenta de que Dios le proveyó vida. E incluso ella menciona esto en el verso 13, “Entonces llamó el nombre del Eterno que con ella hablaba: Tú eres Dios que ve” (Génesis 16:13). En hebreo, la palabra El Roi, significa el Dios que mira. Y pienso que es importante para todos nosotros tomar en serio la historia de Agar donde parecía que Dios iba a trabajar por medio de Sara, Abraham y el hijo de la promesa y, aun así, no descartó a Agar.
Él la observaba y cuidó de ella y le hizo promesas, y, por último, Dios nunca alejó sus ojos de ella, aun cuando parecía que estaba destinada a la perdición. Dios velaba por ella.
A veces en nuestras vidas nos sentimos de esa forma, que pareciera que nos enfrentamos a circunstancias imposibles, que hay dificultades que simplemente parece que no pueden ser resueltas. Y, aun así, ¿podemos orarle al Dios que ve? ¿Podemos pedirle entendimiento? ¿Podemos pedirle, orarle para que nos dé una fe más fuerte para alcanzar lo que parece imposible en nuestras vidas?
Si esos momentos vienen a ti, lee la historia de Agar en Génesis y debería ayudarte a entender de manera más completa que Dios sí ve.
Esto es BT Daily. Nos vemos la próxima vez.