¿De dónde provienen sus creencias?
Mis recuerdos de la infancia de la Pascua Florida son escasos y distantes entre sí. Recuerdo que de vez en cuando me abrigaban para un servicio al amanecer y unas cuantas cacerías de huevos de Pascua en el patio, pero eso es todo.
Más que nada, recuerdo haberme sentido confundido. ¿A quién se le había ocurrido la idea de levantarse en la oscuridad para tener servicios religiosos al despuntar el sol?
Eso no me atraía en absoluto, ni tampoco la búsqueda de huevos de Pascua, sobre todo cuando los niños mayores y más grandes que yo encontraban primero los mejores.
Durante un tiempo mi familia tuvo algunos conejos en jaulas detrás del garaje, y pese a mi corta edad me di cuenta de que estos roedores no ponían huevos, así que ¿por qué fingir que lo hacían?
En resumen, la Pascua Florida me parecía desconcertante. Mis padres pensaban lo mismo, y no pasó mucho tiempo antes de que dejaran de celebrarla.
Sus razones eran simples: descubrieron que la única vez que la palabra “Easter” (Pascua Florida) aparece en la Biblia en inglés es en la versión King James, en Hechos 12:4, pero que la palabra original aquí es el vocablo griego para Pascua. La Pascua Florida en realidad no aparece aquí en absoluto, sino que fue insertada por un traductor confundido.
¿De dónde había venido la Pascua Florida, entonces?
Buscaron en varias enciclopedias para aprender sobre los orígenes de la Pascua Florida y sus tradiciones, y rápidamente se dieron cuenta de que los servicios de la salida del sol, los conejos y los huevos formaban parte del antiguo culto a la diosa babilónica de la fertilidad, Ishtar, cuyo nombre se conserva hoy en día en la palabra inglesa Easter (equivalente a Pascua Florida, como ya se explicó), y que estas costumbres y símbolos eran comunes en la religión pagana mucho antes de que apareciera el cristianismo.
Al profundizar más en la Biblia, vieron en Deuteronomio 12:29-32 que Dios ordena a su pueblo no adorarle con las costumbres y prácticas que otros pueblos usaban para adorar a sus falsos dioses y que él llama abominación a tales tradiciones, algo que detesta y se niega a aceptar.
Por tanto, dejaron de celebrarla. ¡No más Pascua Florida para ellos!
Su búsqueda los llevó a descubrir que muchas de las prácticas que comúnmente se piensa que están en la Biblia, ¡en realidad tenían orígenes muy dudosos que no tenían nada que ver con el cristianismo!
Este proceso de aprendizaje tomó tiempo, de hecho, varios años. También buscaron en la Biblia intentando averiguar cómo encajar los tres días y tres noches que Jesús prometió que estaría en la tumba (Mateo 12:40) entre una crucifixión en Viernes Santo y una resurrección en Domingo de Pascua. Pero aprendieron que esto simplemente no calzaba y que, a lo mucho, en ese periodo solo transcurrieron dos noches, un día y una pequeña parte de otro día.
El punto de quiebre llegó cuando se dieron cuenta de que la Biblia revela una serie de festivales y días santos que explican el plan de Dios para la humanidad, cómo estos nos enseñan sobre el papel de Jesucristo en ese plan, y que si bien Jesús, los apóstoles y la Iglesia primitiva celebraban estos días, han sido en gran medida ignorados por el cristianismo tradicional durante los últimos 2000 años. Mis padres comenzaron a observar estos días.
Gracias a su diligente búsqueda de lo que la Biblia realmente enseña sobre tales cosas, lo que me llevó a examinar el tema por cuenta propia, no he tenido que desaprender un gran cúmulo de suposiciones y enseñanzas erróneas que simplemente no son ciertas. He estudiado estas mismas cosas en gran profundidad, y compartimos los detalles claves con ustedes en este número.
¿Y qué hay de usted? ¿De dónde saca sus creencias? ¿Las ha comprobado para ver si están de acuerdo con la Palabra divinamente revelada de Dios, la Biblia? Si no lo ha hecho, ¿no cree que es hora de empezar? BN