Jesucristo dijo que él era un rey en Juan 18:36-37. En esta misma aseveración agrega que su Reino “no es de este mundo”. Muchas personas interpretan que las palabras de Jesucristo significan que su reino es espiritual en esencia y que su gobierno solo tiene que ver con el corazón y la mente de aquellos que le aceptan.

Sin embargo, el reinado de Jesucristo es mucho más: es físico y espiritual. Sí, sus seguidores y discípulos se someten a sus leyes en el corazón y en su mente. Pero al mismo tiempo, la escritura nos dice que en el futuro Jesucristo reinará en toda la tierra y sobre sus habitantes.

La vida perfecta de Jesús en la carne es una demostración de su capacidad para asumir el papel de Rey sobre toda la humanidad. Él ha sido designado oficialmente en ese puesto por Dios el Padre. Sin embargo, el tiempo señalado para su comisión todavía no ha llegado. Dios le ha dado a la humanidad un tiempo fijo determinado para gobernarse por sí misma. Cuando el tiempo asignado a la humanidad termine, Jesucristo regresará a la tierra para establecer la ley de Dios sobre la Tierra.

La Biblia no dice de cuánto tiempo dispone la humanidad para tratar de gobernarse a sí misma (Hechos 1:7; Mateo 24:36-44)

El tiempo de su regreso será un momento crucial en la historia humana que se ha profetizado en Apocalipsis 19:11-16. En estos versículos Jesús habla como Rey de Reyes y Señor de Señores. Entonces, todos los gobiernos humanos y autoridades estarán bajo la directa autoridad de Jesucristo, quien regirá en la tierra. El será la cabeza suprema de todos los gobiernos humanos.

Como Rey, Jesucristo será un juez supremo encargado de hacer cumplir las leyes y un árbitro de disputas (Isaías 2:2-4). El territorio de su Reino será la tierra y toda la humanidad será estará sujeta a su autoridad. Su propósito será cumplir el deseo del Padre sobre la Tierra y representar las metas y los valores de Dios que está en los cielos. Aquellos que se sujeten a Jesucristo en esta era, tendrán un papel importante asistiéndole a en la segunda fase del plan de Dios que empieza con el retorno de Jesucristo. El propósito de las reglas de Jesucristo como Rey de Reyes es restaurar todas las cosas y reestablecer una relación apropiada con Dios.

Este período del reinado de Jesucristo sobre la tierra como Rey de Reyes tendrá una duración de 1000 años (Apocalipsis 20:4). Entonces, cuando todas las cosas sobre la tierra estén sujetas a las leyes de Dios, Jesucristo entregará el reino al Padre (1 de Corintios 15:23-28).

Para más información sobre la venida de Jesucristo como gobernante sobre la tierra lea o solicite el estudio bíblico El Reinado de Jesucristo sobre la tierra: Qué y Cómo será (Por el momento, sólo en inglés) o bien, El Evangelio del Reino de Dios.