Décimo Segundo Mes: Adar: Santiago, el hermano del Señor

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Décimo Segundo Mes: Adar

Santiago, el hermano del Señor

Santiago, fue hermano del Señor (Mateo 13:55; Marcos 6:3; Hechos 12:17; 15:13; 21:18; 1 Corintios 15:7; Gálatas 1:19; 2:9, 12; Santiago 1:1). En un tiempo, hubo duda de que si este Santiago era un real hermano de Cristo. Sin embargo, la misma biblia confirma que fue medio hermano de Cristo, es decir uno de los hijos que tuvieron José y María (Mateo 12:46;13:55, 56; Juan 7:3,5).  Más tarde fue conocido como Santiago el justo. No fue apóstol de Cristo durante su ministerio terrenal. Además, debemos considerar que hubo tres personas con el mismo nombre registrados en el Nuevo Testamento. Los otros dos fueron: Santiago, hijo de Zebedeo y Salomé hermana de María. El otro Santiago fue hijo de Alfeo (Cleofas) y de la otra Maria, ese Santiago fue apóstol de Jesús (Mateo 10:3; Marcos 3:18). 

Santiago fue hermano mayor de Juan y uno de los doce. Por tanto ambos fueron primos hermanos de Jesús.  Debido a su parentesco de medio hermano de Cristo, es necesario dedicar un poco más de atención a este honorable Santiago. Se habla de él como uno de los cuatro hermanos y al menos dos hermanas que tuvo Cristo (Mateo 13:55, 56; Juan 2:12; 7:3-5, 10). No fue creyente durante la vida de nuestro Señor. Junto con los otros hijos de José y María, Santiago no aceptó el mesianismo de Jesús (Mateo 13:57; Lucas 7:20, 21; Juan 11:5). Sin embargo, no puede haber duda de que no permaneció impasible ante la bondad. Porque el altruismo y el ejemplo de Cristo y el hecho de haber vivido con su medio hermano durante casi treinta años, dejó una huella profunda en Santiago.

Fue testigo de la resurrección de Cristo (1 Corintios 15:7). Parece que Santiago fue ganado a la fe por una manifestación especial de Cristo resucitado. El apóstol Pablo sólo conocíó a un "Santiago", aquel al que se alude con frecuencia en el libro de los Hechos de los Apóstoles. El resultado de esa gloriosa visión y conversación transformó a Santiago en discípulo y creyente. Y después de esta experiencia encontramos a "los hermanos del Señor" reunidos con "los apóstoles" y "las mujeres" en un aposento alto (Hechos 1:14). Y más tarde llegó a ser un verdadero pilar de la Iglesia en Jerusalén. (Hechos 12:17; 15:4-34; 21:18, 19; Gálatas 2:9).

Fue conocido por su piedad y por eso fue llamado "Santiago el justo". También la biblia nos habla de su estricta adhesión y obediencia a la ley de Dios (Hechos 21:18-26; Gálatas 2:12). Fue el escritor de la epístola que lleva su nombre, que siempre se atribuye a Santiago. Pero tal era su carácter que no se autodenominaba hermano, sino sólo siervo o "esclavo" de Jesucristo. Su epístola nos da un admirable resumen de los deberes prácticos que incumben a todos los creyentes.

Fue un hombre que creía en el poder de la oración, como lo evidencia el espacio que le dedica en su epístola. Se dice que debido al hábito de arrodillarse siempre en intercesión por los santos, sus rodillas se hicieron callosas como las de un camello; Por eso llegó a ser conocido como "El hombre con rodillas de camello". Él aconseja a los hermanos que soporten con firmeza las injusticias del mundo y no anden quejándose. Les recuerda que Cristo vendrá un día para corregir todo esto. También se dice que fue cruelmente martirizado por los escribas y fariseos, quienes lo arrojaron desde una altura. Y como la caída no lo mató, entonces sus enemigos lo apedrearon, y lo remataron con un garrote. Al otro lado del valle de Josafat, hay un sepulcro con una inscripción que dice "La Tumba de Santiago".

Adar 5786