Estimado amigo:

Gracias por su interés y su pregunta acerca de los tatuajes. Los tatuajes son mencionados en la Biblia: “No se hagan heridas en el cuerpo por causa de los muertos, ni tatuaje en la piel” (Levítico 19:28 Nueva Versión Internacional).

Las palabras hebreas originales son “nathan qa’aqa”, que según la International Bible Encyclopedia se refieren al “procedimiento de hacer una marca o diseño en la piel mediante pinchaduras con agujas cubiertas de pigmentos” (1988, vol. 4, p. 739). La Real Academia Española dice: “Grabar dibujos en la piel humana, introduciendo materias colorantes bajo la epidermis, por las punzadas o picaduras previamente dispuestas”.

Muchos creen que esta prohibición de los tatuajes en Levítico 19:28 solo es aplicable en el contexto de prácticas paganas especificas, es decir, que los tatua­jes a que alude son aquellos que, tal como los cortes, son hechos por los muertos (o sea, como parte de las costumbres idólatras de duelo e intentos de inducir a los dioses para que ayuden a los fallecidos en la otra vida). Sin embargo, la prohibición en contra de los tatuajes en Levítico 19:28 puede considerarse independiente de las “heridas en el cuerpo por causa de los muertos” si se toma en cuenta la redacción especifica del versículo.

El Diccionario bíblico de Unger (Unger’s Bible Dic­tionary) respalda lo anterior con esta afirmación: “En Levítico 19:28 encontramos dos prohibiciones de un desfiguramiento antinatural del cuerpo: ‘No se hagan heridas en el cuerpo por causa de los muertos, ni tatuaje en la piel’. Este último (qa’aqa, que en hebreo significa ‘incisión’) se refiere a los tatuajes y no hace ninguna alusión a usos idólatras, sino que tenia la in­tención de inculcar en los israelitas un respeto apropiado por la creación de Dios” (1974, p. 696, énfasis nuestro).

“Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios los creó; varón y hembra los creó” (Génesis 1:27). El cuerpo humano es el diseño más perfecto de Dios en todo el ámbito físico. Cual­quier intento por marcar el cuerpo muestra falta de respeto por Dios y de reverencia a su creación. Pablo añade: “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que nos sois vuestros?” (1 Corintios 6:19).

Debemos reflejar el pensamiento y los valores de Dios, y esforzarnos por seguir cuidadosa y respetuosamente las instrucciones que nos ha dado. “Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo, y yo os recibiré”

(2 Corintios 6:17). Ese es el contexto de Levítico 19: “Santos seréis, porque santo soy yo el Eterno vuestro Dios” (Levítico 19:2).

En este capitulo se prohibe una serie de acciones que lo convierten a uno en impío, tales como des­honrar a los padres, quebrantar el sábado, practicar la idolatría, robar o negociar de manera fraudulenta, prostituir a la propia hija, usar pesas falsas, y hacerse marcas en la piel mediante pinchazos con agujas bañadas en pigmentos (tatuajes).

En las escrituras anteriores es evidente que la clara intención que Dios tenia en mente es que nuestros cuerpos no deben estar marcados con tatuajes.

Si le podemos servir de más ayuda, por favor háganoslo saber.

Sinceramente, Departamento de Correspondencia Personal