Décimo Mes: Tebet
Pedro, el hombre que negó a su Señor
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Pedro, significa una pequeña roca. Su nombre es la forma griega del apellido arameo Cefas. Pedro era hermano de Andrés e hijo de Jonás (Mateo 4:18; Juan 1:40; 1 Corintios 1:12). Pedro es el hombre que cayó, pero reaccionó a tiempo. Pedro es otro de esos personajes sobresalientes en la galería de hombres de la biblia, que requiere un libro propio para exponer plenamente su vida y sus labores.
De las muchas referencias a esta caña transformada en pequeña roca, obtenemos hechos y características de "El gran pescador". Él fue un pescador de Betsaida, nombre que significa "la casa de los peces". Después residió en Capernaúm, donde Jesús se alojaba con frecuencia durante su ministerio en Galilea. Como dijimos, él era descendiente de Jonás, y Andrés era su hermano. Ambos hermanos eran pescadores en el mar de Galilea y evidentemente estaban en sociedad con Zebedeo y sus hijos.
Pedro conoció a Cristo por primera vez en Betania, al otro lado del Jordán, donde Juan Bautista ejercía su ministerio. Por entonces, Pedro como Andrés eran discípulos de Juan Bautista. Fue Andrés quien presentó a Pedro a Cristo. Él recibió un triple llamado como amigo, discípulo y apóstol. A través del contacto diario con Jesús, viendo y escuchando sus palabras y obras, el carácter de Pedro se fue profundizando y fortaleciendo. Aunque él tuvo un carácter multifacético.
Su vida puede ser abordada desde muchos ángulos. Era muy impulsivo (Mateo 14:28; 17:4; Juan 21:7); al mismo tiempo era tierno y afectuoso (Mateo 26:75; Juan 13:9; 21:15-17); fue dotado de visión espiritual (Juan 6:8), pero a veces era lento para comprender verdades más profundas (Mateo 15:15, 16); fue valiente en su confesión de fe en Cristo, pero culpable de su negación cobarde (Mateo 16:16; Juan 6:69; Marcos 14:67-71); fue abnegado pero inclinado al egoísmo (Mateo 19:27) y a la presunción (Mateo 16:22; Juan 13:8; 18:10); inamovible en sus convicciones (Hechos 4:19, 20; 5:28, 29, 40, 42). Él se convirtió en líder y portavoz de los doce apóstoles, también uno de los tres privilegiados para presenciar la resurrección de la hija de Jairo, luego la transfiguración y la agonía de nuestro Señor cuando estuvo crucificado.
Él mismo se convirtió en un hacedor de milagros, especialmente durante el tiempo descrito en el libro de los Hechos. Hizo una confesión de la deidad de Cristo que se convirtió en el fundamento de la Iglesia, y fue designado mayordomo con autoridad. Él fue el único discípulo que negó miserablemente a su Señor en la hora de crisis, sin embargo, fue restaurado y comisionado nuevamente por Jesús, después de su resurrección. Fue el primero en protestar por su lealtad a Cristo. Además, Pedro no se había educado en la escuela rabínica, porque todos los que estudiaban en la escuela rabínica de entonces, tenían 25 años y se graduaban a los treinta.
Capernaúm, era una aldea al noroeste del mar de Galilea, donde vivía Pedro, ahí había una sinagoga y la casa de Pedro estaba relativamente cerca de la sinagoga. Jesús, al empezar su ministerio, hizo que Capernaúm fuera el centro de su jefatura y no muy lejos de allí, dio su sermón del monte. En cierta manera Pedro estaba interesado en la religión. El primer contacto que tuvieron Pedro y Andrés con Jesucristo nos muestra que ambos habrían de ser los primeros discípulos que llegaron a través de Juan Bautista.
Después de recibir el Espíritu Santo en Pentecostés, el ministerio de Pedro nos muestra que estuvo activo en Jerusalén, entre los años 31 al 35 d.C. cuando Santiago finalmente le sucedió en el liderazgo de la Iglesia, en Jerusalén, durante el año 49 d.C. También se dice que Pedro fue misionero en Palestina, entre los años 35 al 40 d.C. Después los apóstoles se fueron en busca de los descendientes de las doce tribus de Israel, (los de la circuncisión), tal como Jesús les había instruido, quedándose Pablo y Bernabé a cargo de la evangelización de los gentiles, (Gálatas 2:9), Finalmente Pedro y los otros apóstoles murieron en el martirio como Jesús lo había profetizado.